¿TE MIENTES A TI MISMO?
¿Cuántas
veces te has mentido a ti mismo? No es algo que hagamos de forma consciente
porque a nadie le gusta ser engañado, ¿cierto? Es muy probable que al descubrir
que alguien te ha mentido, te sientes enojado, triste y decepcionado.
Esto es
bastante común y sin embargo, no es raro que terminemos siendo víctimas de nuestras
propias mentiras. Sigue leyendo y descubre las razones más comunes por las que
te mientes y cómo evitarlo.
Razones por
las que te mientes a ti mismo
La principal
razón por la que te mientes a ti mismo es para evitar algún peligro, real o
imaginario. De ahí pueden surgir otros motivos.
Esto lo
puedes hacer buscando justificar tus actos y poniendo la realidad acorde a tus
ideas. Puedes pensar que no necesitas dar o buscar ninguna justificación porque
al final tomas tus propias decisiones en base a tu escala de valores.
Esto es
cierto. Sin embargo, nuestra escala de valores no es perfecta y en más de
alguna ocasión te habrás visto entre la “espada y la pared”. Esto pasa cuando
te ves inmerso en dos obligaciones morales que se oponen mutuamente y eliges
salir por la tangente. Cuando esto pasa, ¿eres consciente de que te mientes?,
¿cómo lo justificas?, ¿qué dice eso de ti?
Mentirte es
cruel e innecesario
Te mientes a
ti mismo porque buscas cierta comodidad. Pero, ¿has pensado que la comodidad
está algo, o muy, sobrevalorada? Lo más probable es que te estés mintiendo para
evitar lo desconocido o aquello que crees que te podrá dañar.
Muchos de
nosotros vamos con cierto temor por lo que no conocemos, pero el autoengaño
termina devorando tu alma y generando mucho dolor emocional. Lo irónico es que
muchas de las acciones o experiencias que buscamos evitar de forma inconsciente
pueden volverse las más intensas y reconfortantes de nuestra vida.
Aunque puede
parecer que una mentira te hará la vida más fácil, en realidad es una paradoja.
Con el tiempo, la realidad te estallará justo en la cara y todo el dolor que
evitaste te atacará con mayor fuerza.
Cuando digo
que mentirte es cruel e innecesario me refiero a que las mentiras que tratas de
creerte te destruyen cuando no queda nada que las sustente.
Las
situaciones más comunes en las que te mientes a ti mismo
Es probable
que creas que no te mientes a ti mismo y que sea realmente cierto. De ser así,
¡felicidades! Seguro eres una persona auténtica y completamente libre de
complejos y ataduras emocionales y sociales. Esto de verdad que es posible.
También
puede darse el caso de que te hayas convencido de que tú no te mientes a ti
mismo pero sí lo haces. ¿Cuáles son las situaciones más comunes? A continuación
te describo las dos más comunes:
- Estar
enamorado de dos personas. La situación en la que te mientes a ti mismo más
común. Lo cierto es que cuando amas a una persona simplemente no hay cabida
para otra de la misma forma. Sin embargo, terminar una relación de pareja que
ya se ha desgastado no es tan fácil como quisiéramos. Y es en este punto cuando
puede llegar otra persona que se parece más a lo que buscamos como compañero de
vida. Lo mejor siempre será dar por concluida la primer relación para evitar
dañar lo poco o mucho de bueno que aún queda.
- Continuar
con un empleo que no te satisface. Ya sabemos que necesitas pagar facturas cada
mes. Pero te mientes a ti mismo cuando no dejas ese empleo que no te gusta por
la idea de que no eres bueno para nada más. Es probable que lleves tanto tiempo
en esa situación que te da miedo no estar a la altura de otras opciones o no
encontrar una alternativa mejor. En este caso es mejor darte la oportunidad de
actualizar tus conocimientos si es lo que crees necesitar o dar el paso y
atreverte a buscar otra opción. Puedes estar seguro que ningún cambio llega
solo, siempre los debes buscar.
Mentirte a ti mismo no te ayuda
Date un
momento para analizar tu vida y descubrir si realmente es la que deseas. Muchas
veces encontramos señales que nos gritan que no estamos donde deseamos. Si no
puedes ser honesto contigo mismo, ¿cómo esperas que otros lo sean?
No hay comentarios:
Publicar un comentario