SI ALGO NO TE GUSTA, CAMBIA
¿Qué es lo
que no te gusta de tu vida? Quizás sea algo externo, amistades, trabajo, algo
que tú crees que en tu mano no está poder cambiar. Y es cierto. Pero, sí puedes
cambiarlo indirectamente.
Imaginemos
por un momento que no te gusta cómo está actuando una persona con la que
interactúas o mantienes una amistad. El primer paso es manifestar tu
descontento, pues quizás estés tratando con una persona manipuladora, o
simplemente con alguien cuya personalidad no es compatible con la tuya.
Sea como
fuere, no te gusta, no te encuentras bien en esa situación. No puedes cambiar a
esa persona, en tal caso puedes cambiarte a ti mismo, pero en este punto en que
nos encontramos no procede.
“No es la especie más
fuerte la que sobrevive, ni la más inteligente, sino la que responde mejor al
cambio”
-Charles Darwin-
¿Cómo
debemos enfrentarnos a este momento? Cambiando la situación. Si te encuentras a
disgusto con una persona, ¡aléjate! No puedes cambiar a nadie, pero sí puedes
cambiar las cosas.
El cambio
nos da miedo. Nos han enseñado a tenerle miedo, a aceptar el sufrimiento, a ser
conformistas. Pero, ¿cuánto podemos aguantar en una situación como esta?
Preocupándonos “a lo tonto”
No nos han
enseñado a cambiar las cosas, sino a lidiar con ellas, a enfrentarnos a ellas
y, en todo caso, a “comérnoslas” aunque no nos gusten.
Nos hemos
estado preocupando desde nuestra infancia por enfados, por actitudes, por
situaciones… Preocupaciones que nos afectan negativamente y que no son nada
beneficiosas para nosotros.
¿Eres de las
personas que piensan que se preocupan demasiado? ¿alguna vez te has visto en
la tesitura de preocuparte más que los demás? Si es así, es el momento de que
cambies esta situación, porque probablemente no te gusta,
No preocuparse
en exceso no implica que estemos libres de preocupaciones, pero sí que
aprendamos a no darles tanta importancia como les estamos dando.
Muchas de
las preocupaciones que nos abordan son bastante “tontas”. ¿Realmente merecen
toda nuestra atención? Las demás personas no se la dan, tú tampoco deberías,
empieza hoy a cambiar.
Es increíble
cómo puede cambiar tu vida, cuando decides cambiar un pensamiento. Hay muchas
cosas que nos han inculcado desde nuestra infancia, consideraciones que cuando
nos hacemos adultos nos atormentan porque algo no está funcionando bien.
¡Cojamos el camino acertado!
El camino
acertado es aquel en el que nos encontraremos bien con nosotros mismos, en el
que hemos logrado el equilibrio. Pero, para ello, en ocasiones debemos cambiar.
¿Cómo
podemos cambiar las cosas que no nos están gustando, sea lo que sea? Sigue
estos consejos, porque te ayudarán a librarte del miedo al cambio y lograr por
fin estar a gusto con todo y con todos:
- Son los
que cambian los que verdaderamente lo logran: ellos también han tenido miedo,
miedo a fracasar en su elección, miedo a superar el “es mejor peor por conocido
que nuevo por conocer”, se han arriesgado y han salido triunfantes.
- Utiliza la
incertidumbre para motivarte: porque muchas veces es la misma incertidumbre la
que te desmotiva, pero piensa que lo que te espera es algo mejor. ¿De verdad vas
a seguir en ese estado en el que no estás a gusto? Cambia, lo mejor aún está
por llegar.
- Ocurra lo
que ocurra, acéptalo: sea malo o bueno, todo cambio, toda elección tendrá sus
consecuencias, pero sean las que sean ¡acéptalas! Ha sido tu elección y debes
ser consecuente con esta y todas las que hagas el resto de tu vida. Pero debes
estar orgulloso de haberla tomado. Es mejor mostrarse activo que pasivo ante
las circunstancias. Estás vivo.
- El cambio,
que sea poco a poco: obviamente la brusquedad no va a ser algo que te garantice
resultados positivos, por eso los cambios deben ser progresivos, bien pensados
y con calma. No sirve de nada correr demasiado.
- Es normal
que tengas miedo: es tan normal que debes aceptar esto, pero no permitir que
pueda contigo. Debes ser lo bastante fuerte como para superar este miedo, como
para enfrentarte a él y determinar qué es lo que verdaderamente tiene peso
aquí. ¿Podrá más el miedo o lo que verdaderamente quieres?
- Si tú no
cambias, los cambios vendrán a por ti: porque aunque no lo quieras ver, estás
continuamente cambiando. Tu familia cambia, tus amigos cambian, tu situación
cambia, y a veces estos cambios no están de tu mano, ¡no los eliges! Vienen y
tienes que aceptarlos.
“Cambiar de horizontes,
cambiar de método de vida y de atmósfera, es provechoso a la salud y a la
inteligencia”
-Gustavo Adolfo
Bécquer-
El miedo es
normal, pero si algo no te gusta en tu vida, en tu situación, en algo que estés
viviendo, cambia. Esto te hará más feliz. Vivir en una situación que no te
resulta agradable provocará que tu carácter se vaya tornando negativo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario