jueves, 27 de noviembre de 2014

Carmen Rodríguez del Río, sicóloga

DUEÑ@ DE TU DESTINO

Constantemente estamos creando pensamientos. Ya te has dado cuenta de que tu mente no para. Va de una idea a otra, saltando como un mono de rama en rama. A veces, te sorprendes con pensamientos o imágenes mientras hablas con otras personas, mientras haces cualquier actividad. Tu cabeza no para. Sigue elaborando y elaborando de manera incansable.

Toda esa actividad crea un estado interior. Marca tus emociones. Si inviertes tu pensar en anticipar acontecimientos e imaginar sus consecuencias negativas, tu estado creado será de miedo, ansiedad, angustia. Si revives momentos pasados no demasiado agradables, o te centras en lo que ya no tienes, obtendrás tristeza. Si , por el contrario, buscas culpables (incluido tú mism@), te encontrarás con una sensación de enfado con el mundo, los demás y/o tú mism@.

Lo que elijas tener en tu cabeza, creará parte de tu futuro. De hecho, ya lo está haciendo. El miedo que has creado ya te está afectando y afectará a tus acciones y reacciones futuras.

No es fácil cambiar lo que aparece en tu mente. Parece que no depende de ti a veces. Pero que no sea fácil, no quiere decir que no merezca la pena empezar con la tarea. Puedes empezar por observar lo que hay ahí dentro y comprender cómo se relaciona con cómo te sientes. Una vez que lo veas, empezará a removerse.


Hoy, prueba a observar de qué van todas esas cosas que piensas y COMPRÉNDETE.


No hay comentarios:

Publicar un comentario