DE TANTO PASARLO MAL, AHORA SOLO DISFRUTO DE LA VIDA
“Hay que tener fe en uno mismo. Ahí reside el secreto. Aún
cuando estaba en el orfanato y recorría las calles buscando qué comer para
vivir, incluso entonces, me consideraba el actor más grande del mundo. Sin la
absoluta confianza en sí mismo, uno está destinado al fracaso.”
“La vida es una obra de teatro que no permite ensayos. Por
eso, canta, ríe, baila, llora y vive intensamente cada momento de tu vida antes
que el telón baje y la obra termine sin aplausos”
Charles Chaplin
Llega un momento en nuestra vida en el que estamos cansados
de dramas. De los nuestros, de los que nos hemos montado en nuestra cabeza y de
los que nos rodean.
Nos sentimos también cansados de evaluarnos, de revolcarnos
en errores del pasado y de abrir heridas que nos hacen parecer masoquistas.
Hay gente que siempre sabe equilibrar y no convierte su vida
en un valle de lágrimas. Otros, sin embargo, hemos recorrido infinidad de veces
ese valle de lágrimas, no sabemos en qué consiste la perfección.
Pero de repente, en algunas personas aparece un hartazgo,
una pereza profunda a seguir la misma ruta de emociones demasiado fuertes,
puede ser que ya simplemente no podemos más, o que hemos aprendido que no sirve
para nada.
Nuestra energía se nos va.
Así que si te encuentras en ese punto, no estés inquieto por
esta nueva sensación en ti.
Estás preparado para una nueva etapa, que será esplendorosa:
– Empezarás a actuar no para que los demás lo aprueben, sino
porque realmente es lo que te apetece.
Si no te llama, o no te escribe, no pensarás qué hay en ti
que marcha mal.Pensarás que esa persona, no era para ti, y seguirás adelante
con una nueva y maravillosa indiferencia.
– Pensarás menos y sentirás más.
– Empezarás a apreciar los pequeños placeres de la vida.
– Cerrarás etapas con portazo y llave.
– El pensar en ti ya no te resultará egoísta.
– Dejarás de compararte con los demás, tú misma eres el
espejo donde mirarte para corregir y mejorar, serás la referencia para mejorar
tu vida.
– Agradecerás las críticas constructivas y aprenderás a
hacerlas tú también.
– Serás lo suficientemente asertivo para no ir a fiestas que
no te apetecen con gente que no te apetece.
-Darás sin esperar recibir, pero aprenderás a saber donde
está el límite de la generosidad y del interés.
–Dejarás de analizar comentarios y desprecios. Ese tiempo lo
usarás en planificar cosas importantes.
–Mejorarás en todo lo que te has propuesto, porque sabrás
que si no lo haces tú nadie lo hará por ti.
-Hacerte la víctima no sirve.Tomarás las riendas de tu vida
y aceptarás estoicamente las derrotas. Son tuyas, no deberás dar explicaciones
de ellas.
-Pedirás ayuda solo cuando sepas que existe y a las personas
que lo hacen de corazón.
-Sabes ya que pocos amigos dan la cama y la seguridad. Tener
demasiados no es sinónimo de estar más acompañada.
-Tus valores se afianzan con cada paso que das.
-Sustituirás la pereza por la voluntad.
– Utilizarás la tecnología para comunicarte, pero no serás
una esclava de ella.
– Las críticas destructivas serán leídas y archivadas sin
causa.
Quizás pienses como has podido perder tanto tiempo en
agradar a gente que en realidad no te importa, cómo te has podido dejar
influenciar de una manera tan personal con ciertos comentarios. Pero durará
pocos minutos, porque te darás cuenta de lo feliz que estás ahora
– Te vendrán problemas, pero tu experiencia te ayudará a
relativizarlos y solventarlos. No te preocuparás, actuarás.
– Puede ser que no hayas merecido tantas decepciones en tu
vida, pero cae en la cuenta de que tanto dolor lo has transformado en madurez,
calma y serenidad.
“Y ahora, en este momento de mi vida, no quiero casi
nada. Tan sólo la ternura de mi amor y la gloriosa compañía de mis amigos. Unas
cuantas carcajadas y unas palabras de cariño antes de irme a la cama. El
recuerdo dulce de mis muertos. Un par de árboles al otro lado de los cristales
y un pedazo de cielo al que se asomen la luz y la noche. El mejor verso del
mundo y la más hermosa de las músicas. Por lo demás, podría comer patatas
cocidas y dormir en el suelo mientras mi conciencia esté tranquila.”
Ángeles Caso
Ahora, que estás feliz de conocerte y a los demás (aunque ya
no te importe tanto) les resulta irresistible esta faceta tuya. Porque no hay nada
más magnético que sentirte bien en tu piel y en tu mente.
Fuente: http://lamenteesmaravillosa.com/de-tanto-pasarlo-mal-ahora-solo-disfruto-de-la-vida/
No hay comentarios:
Publicar un comentario