LIBERARSE DE LOS CÁNONES
Cuando nos obsesionamos por lucir un cuerpo esbelto y
juvenil, somos víctimas de un estereotipo de belleza. Para liberarnos de este
yugo, nos conviene saber que lo que se entiende por belleza es mucho más amplio
y rico que lo que dicta el estereotipo.
Recordemos que el canon de belleza imperante no es universal
sino que cambia en las diferentes culturas y a lo largo de la historia. Tampoco
refleja la gran diversidad de tallas, colores de piel y edades de los
integrantes de una sociedad. ¿Te imaginas lo aburrido que sería si todos
fuéramos iguales?
Así que pongamos nuestra energía en aceptarnos y querernos
como somos. Renunciemos a cambiar aquello que no se puede cambiar: la altura,
la edad o la estructura corporal heredada genéticamente… Aunque no seamos como se espera que sea una persona de éxito, también
podemos ser felices.
Cuando la presión del estereotipo deja de afectarnos, nos
damos cuenta de que el éxito y la felicidad llegan cuando somos nosotros mismos
porque, entonces, somos libres para decidir lo que queremos cambiar.
A partir de la aceptación y del amor por uno mismo, nos será
mucho más fácil adelgazar o comer sano, por ejemplo. La belleza surge de
nuestro interior. Por esto es tan importante filtrar la información, rechazando
la que nos hace frágiles y quedándonos con la que nos fortalece.
SUSANNA TRES Psicóloga formada en terapia Gestalt
"La curiosa paradoja es que cuando me acepto tal cual soy, entonces puedo cambiar"
- Carl Rogers -
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