jueves, 31 de julio de 2014


NO DESESTIMES TUS SUEÑOS

A lo largo de la historia de los sueños, los hombres y mujeres relacionados con la ciencia y la religión han respetado las visiones y los presagios.

En la Biblia, los patriarcas, profetas y reyes del antiguo Israel, además de Jesús y sus discípulos, son retratados como soñadores y profetas cuyas visiones y perspectivas, tanto despiertos como dormidos, guiaban a su gente.

No hace tanto tiempo, el psicólogo suizo Carl Gustav Jung concluyó que, en algunas ocasiones, el estado de sueño puede proporcionarnos acceso a información fiable sobre acontecimientos presentes y futuros de nuestro día a día o de asuntos mundanos.

Podemos tener también una visión más privilegiada sobre lo que llama las realidades arquetípicas en el inconsciente colectivo. Esto, explicaba Jung, nos llevará en su momento a formas superiores de comprensión y de descubrimiento creativo.

Aportación creativa

Resulta interesante destacar cómo muchos de los mayores descubrimientos, creaciones e inventos científicos y artísticos de la era moderna han tenido su origen en sueños y visiones.

En el siglo XVIII, James Watt, el padre de la revolución industrial, reclamaba haber obtenido la idea del motor a vapor en manos de un donante sobrenatural a través de un sueño.

Había estado trabajando en los problemas implicados en ese tipo de motor, pero no concebía cómo podía hacerlo funcionar. Contaba que se durmió en su escritorio y que le mostraron en un sueño vívido todo el modelo operativo del motor tal y como tenía que ser. Cuando se despertó, se limitó a copiar y construir lo que había «visto».

Algunos de los mayores genios creativos (artistas, músicos, novelistas y poetas) también cuentan que han recibido a través de sueños y visiones el tema, argumento y segmentos de sus obras maestras. Robert Louis Stevenson, por ejemplo, contaba que la historia de Dr. Jekyll y Mr. Hyde se originó en un sueño.

Tipos de sueño

Como todos sabemos, no todos los sueños son visionarios. Los autores de las antiguas Grecia y Roma reconocían varios tipos de sueño, entre los que se encontraban los tipos no psíquicos habituales. Estos tipos de sueño podían atribuirse a causas más mundanas, como por ejemplo comer demasiado antes de acostarse, las enfermedades, etc.

Hoy en día, mucha gente que se dedica a la investigación de los sueños cree que el proceso del sueño desarrolla una función psicológica importante al procesar y asimilar nuestros impulsos emocionales. Esto sucede tanto si la persona recuerda o incluso descifra el contenido simbólico del sueño, como si no.

De hecho, todo el mundo sueña, recuerde o no los sueños.

Se calcula que pasamos soñando unos 45 minutos de una noche de unas ocho horas, los cuales se distribuyen en diferentes intervalos a lo largo del proceso de sueño.

La fase del sueño se caracteriza por el movimiento ocular rápido (MOR) debajo de los párpados cerrados. Gran parte sucede durante el final del período de sueño.

Se ha descubierto que si se priva a una persona del estado de sueño y sólo se le permite el tipo de descanso más profundo sin sueños, ésta mostrará menor capacidad para lidiar con el estrés y con las dificultades emocionales del día a día. Esto parece indicar que soñar podría desarrollar una función asimilativa emocional y psicológica.

Lenguaje secreto

En los sueños convencionales y en los sueños psíquicos o espirituales nos encontramos con el misterioso lenguaje del inconsciente.

Es nuestra decisión aprender a leer este lenguaje si queremos entendernos mejor a nosotros mismos y desarrollar nuestro potencial creativo.

Tal y como muestran los sueños y las visiones, el lenguaje de nuestras mentes inconscientes es pictográfico y emocional. Recibimos, almacenamos y transmitimos información sobre acontecimientos y objetos de nuestro alrededor, además de nuestras reflexiones internas.

Nuestras mentes reciben y almacenan dichas imágenes a lo largo del día y la noche a través de los cinco sentidos físicos y por telepatía. Nuestra reacción emocional a tal información codificada en imágenes ha de clasificarse y asimilarse en algún momento. La fase de sueño es un proceso en el que se clasifica la información cargada de emociones que está almacenada en el subconsciente.

Los sueños son símbolos

La mayoría (no todas) de las imágenes de las que tomamos conciencia en la fase del sueño son símbolos de otras realidades. Es como si nuestra mente subconsciente empleara imágenes de otras cosas  que no nos asustan tanto como las de verdad implicadas.

Estas imágenes son el lenguaje básico del inconsciente. Nuestro trabajo consiste en aprender a interpretarlas.

Hay varios niveles de simbolismo en este lenguaje del inconsciente que domina nuestros sueños y visiones.

En primer lugar, están los símbolos universales para todas las personas de cualquier cultura. Jung los llamó arquetipos. Entre estos símbolos se encuentran la madre, el padre, el hijo, el cielo, la tierra, el sol, los animales, etc.

En segundo lugar, están los símbolos tomados a partir de objetos, los papeles sociales o acciones que están condicionados por una cultura o religión específica, etc. Se incluirían símbolos como la cruz, la Estrella de David o acciones que se hayan convertido en símbolo de la devoción religiosa o del orgullo nacional.

En tercer lugar, están los símbolos personales, que serían aquellos objetos o acontecimientos que son significativos para un individuo a causa de su experiencia.

Análisis de los sueños

Para analizar un sueño o una visión de forma precisa, debemos comprender el símbolo y lo que el autor del sueño asocia a éste.

Aunque existen varias formas de trabajar los sueños, la siguiente técnica  me parece muy efectiva. La concibió el Dr. John Rossner, profesor de religión comparativa en la Universidad de Concordia.

1. Entra en estado de relajación, como en el que te encontrarías al despertarte.

2. Recuerda toda la secuencia del sueño. Escríbela o grábala.

3. Incluye todos los detalles, sin importar lo absurdos que puedan parecer a tu mente consciente (tendrán un significado en el lenguaje inconsciente o en uno de los tres niveles anteriores de símbolos del sueño).

4. Cuenta de nuevo toda la historia del sueño. Esta vez, cuéntala con otras palabras (esto te ayudará a que se te ocurran significados asociados o equivalentes de las imágenes y los sentimientos originales expresados en el sueño).

5. Cuando lo hagas, descubrirás en tu conciencia diversas asociaciones con las imágenes o escenas del sueño. Toma buena nota.

6. Ahora, revisa cada imagen principal de los acontecimientos del sueño para preguntarte:

1. ¿Este objeto o evento es universal, está condicionado por una cultura específica o es personal?

2. ¿Cuál es su simbología universal o cultural, o qué significado tiene para mí?

 7. Para encontrar la respuesta a b., haz lo siguiente:

 1. Describe el objeto, la persona o el acontecimiento según:

 Lo que hace

 Su aspecto

 Los sentimientos que evoca en la mayoría de las personas o a ti a nivel personal.

 Al hacer este procedimiento, recuerda que los acontecimientos arquetipo como las bodas, los nacimientos, los fallecimientos o los funerales suelen ser un símbolo de otra cosa y no deberían percibirse de forma literal.

Marilyn Rossner
www.iiihs.com

lunes, 28 de julio de 2014



LA SANACIÓN KÁRMICA CUÁNTICA
La física sostiene que el universo es una especie de maquina en la que las mismas causas tendrán siempre los mismos efectos. Por ello, si sabemos el estado inicial podemos predecir prácticamente todos los estados futuros.

En nuestra vida (psíquica y espiritual) las cosas con las que nos encontramos es necesario saber dónde posicionarlas dentro de este esquema.
Analizar nuestros estados de ánimo, y preguntarnos por qué a mí, más las cosas que se repiten en nuestra vida diaria, estaríamos hablando de circunstancias o también del karma, pero en realidad no sólo estamos hablando de esta ley, estamos hablando también del entrelazamiento cuántico. El autor Sir James Frazer dice: “las cosas que han estado una vez en contacto entre sí, siguen influyéndose mutuamente de lejos tras haberse  cortado el contacto físico”.

El biólogo Ruper Sheldrake, tiene una teoría científica a través de  la resonancia mórfica que explica cómo se transmiten estas causas que bajo nuestro paradigma son invisibles. Esta  teoría describe la transmisión de información en la naturaleza a través de campos morfo genéticos (la información es un campo como la gravedad), en el que la cercanía de una especie y la frecuencia de un hábito (lo que ha pasado tiene más posibilidades de volver a pasar) determinan la intensidad con las que nos vemos afectados por esta dimensión de información. Y lo que les sucede, por ejemplo, a tu madre o a tu novia te afecta más, generalmente, de lo que le sucede a un hombre en Madagascar, por el nivel de entrelazamiento cuántico que existe entre tus células y sus células. En este sentido estamos creando una estructura telepática de interconexión, a través de la cual la unidad se ensambla y se proyecta. Porque su cuerpo energético está horadado por filamentos que permanecen unidos y siguen intercambiando energía (en la mayoría de los casos drenándolo) los llamados lazos u observadores del pasado.
Para deshacer estas conexiones  se tiene que hacer lo que se llama recapitular es decir, desmadejar la red energética del pasado. ¡¡Esto es posible!!

Las relaciones afectivas que hemos tenido, quizás de alguna forma, marcan la  manera en la que el universo se relaciona con nosotros. Como si las personas fueran símbolos de la totalidad del cosmos, planetas danzantes en nuestra órbita estelar. Probablemente, en la medida en la que hemos tratado a los demás, la matriz material que compone al Universo nos recibe y nos trata a nosotros. Esta es la ley de oro, el karma, pero también entendido desde la física cuántica probablemente estemos cargando con: numerosas relaciones sin cerrar que causan entrelazamiento cuántico, transmitiendo información que no somos conscientes de que se está transmitiendo y es como un ordenador con múltiples pantallas abiertas el cual se va ralentizando. Y hace nuestro día a día más cansino y repetitivo, pues son las mismas pantallas o ventanas abiertas, mismas acciones y secuencias con distintas imágenes o personajes
Como disolver esto y tener un rumbo más acorde a lo que queremos en nuestra vida.

El físico Jean Pierre Garnier nos da la ley universal de desdoblamiento del tiempo, con la cual podemos empezar a desmadejar esto. Ya hay varias personas trabajando con esto y han hecho muchos cambios en su vida. Trabajan desde lo real y desde este plano con una modalidad cuántica y matemática. Haciendo encontrar las preguntas que no hemos contestado de nuestro ser original (esas pantallas del ordenador abiertas), y las hacen enlazar con las respuestas que ya están en nuestro futuro, mostrando el desdoblamiento del tiempo. Pero todos estos mecanismos maravillosos y que trabajan de una manera más acorde con nuestro tiempo y utilizando esta ley y esta apertura temporal, de este tiempo del no tiempo de la que hablaban los Mayas en sus profecías. Pero sucede que algunos tienen resultados y otros no, o el resultado es muy dispar o no beneficioso. Con consecuencia dicen: no es para todos este sistema, entonces es una ley universal ¿sí o no?. Yo puedo afirmar que es una ley universal y es para todos. Lo que sucede que la intensidad  de las pantallas, ventanas, preguntas o emociones y lazos desde donde estamos sujetados al campo metamórfico es más intensa en unos que otros. Y esto lo debemos disolver o atenuar antes de realizar el trabajo del desdoblamiento del tiempo.  Esto sería la corrección kármica cuántica, ir apagando o cerrando estos lazos ventanas, que tienen tanta carga y velocidad que no nos permiten realizar el intercambio cuántico de preguntas y respuestas de nuestro ser sin carga cero. Y si no tenemos un instante cuántico de carga cero seguirá activo algún observador del pasado que nos une a esos lazos que ralentizan todo nuestro andar.
Además estas cargas son mucho más rápidas ya que las mismas se encuentran en una dimensión más veloz que nuestro físico. Entonces entran a esa velocidad no sólo interrumpiendo nuestro trabajo de desdoblamiento. Sino que reactivando en el plano metamórfico estas acciones como en el principio y recomenzamos desde donde lo habíamos dejado, siendo atrapados en la reacción kármica y pendular de un extremo a otro.

Debemos aprovechar este momento único de la humanidad y poder regresar a casa. Al  universo en nuestro sitio en el ser original, entregándole toda la experiencia acumulada en este plano físico. La metodología es sencilla y muy práctica. Silenciamos, disolvemos acciones y observadores del pasado que dan cargas a nuestra existencia haciéndonos repetir lo mismo una y otra vez. Al solucionar esto nuestro ordenador o programa de vida va siendo, no sólo más veloz sino que también mejor.
Es más fácil decidir y quitarmos cargas emocionales y mentales que arrastramos desde tiempos inmemoriales.

Esto producirá hechos de mejor nivel sin tener que pasar por experiencias difíciles o duras de dolor, dejando atrás situaciones que no queremos volver a repetir, generando mejor comunicación con los que nos rodean. Sobre todo con nuestro ser original acomodando el programa y nuestro físico para recibirlo, en este plano. Trayendo nuestra maestría nuestro conocimiento y trabajando en orden con todo el universo en el amor incondicional. En otras palabras trayendo el cielo a la tierra y a tu vida.

Daniel Testino.
www.enlaflordelavida.com
Telf. 91 2 833 688


 

sábado, 26 de julio de 2014


RELACIONES CONSCIENTES

CÓMO RELACIONARNOS SIN CONFLICTOS Y RESPETANDO AL OTRO.

Para tener relaciones sanas con el otro es evidente que es necesario conocerse a uno mismo, y para ello es importante tomar consciencia de los cuatro aspectos del ser humano: El físico, el emocional, el mental y el espiritual.

Es cierto que todos están muy entrelazados, por ejemplo el físico va muy vinculado al emocional, ya que las emociones están cristalizadas en nuestra corporeidad. El mental está muy vinculado con el emocional ya que todo lo que pensamos crea una impronta en lo emocional y físico.

Pero en principio es importe mirarlos por separado, para poder expresarnos desde todos los niveles sin confundir uno con otro, aunque todos sabemos que están completamente unidos.

EL DARSE CUENTA DEL ASPECTO FÍSICO Y EMOCIONAL

Entrar en nuestro cuerpo no es tarea fácil pues estamos o muy metidos en la emoción o en lo mental, y para ello hay que poner toda nuestra atención en el cuerpo.

No todo el mundo llega al cuerpo a través de los mismos caminos. Hay personas con mucha carga emocional, y para ellas hacer cualquier ejercicio aeróbico es muy adecuado, antes o al mismo tiempo que practicar yoga. Este tipo de ejercicio aeróbico activa nuestra respiración y nos ayuda a ser más conscientes de las emociones desde el cuerpo y no tanto desde lo mental. Pues ya sabemos que el cuerpo no engaña, mientras que la mente nos lleva a lugares muy desconectados de lo que pasa en el momento presente. Y así se crean historias con etiquetas de las que luego cuesta salir.

Para conectarnos con el cuerpo también es importante desarrollar la receptividad y la sensibilidad, para aprender a recibir y para entrar en relajación profunda. Para ello los masajes sensitivos, son una gran puerta. De vez en cuando darse un masaje es el mejor alimento para uno, y no solamente terapéuticos sino masajes sensitivos, ya que son una buena forma de dejar el cuerpo disponible para una buena escucha y sensible a la comunicación.

Con la respiración consciente podemos subir nuestro nivel energético y canalizar nuestras emociones sin drama y de forma orgánica.

A través de propuestas psico-corporales como Danza Consciente, Biodanza, Movimiento Auténtico, etc. podemos ir disolviendo nuestra coraza corporal caracterológica que nos mantiene cerrados a  los demás.

Sensibilizándonos, para abrir nuestro corazón a la vida y a una comunicación más afectiva con el otro. De esta manera ayudamos a que todo nuestro contenido interno  se exprese hacia fuera para vincular nuestros anhelos con nuestra realidad cotidiana y acercarnos al otro con nuestra percepción más amplificada.

Con todo esto desarrollamos una buena autoestima Corporal, Afectiva y Sexual, soltando y liberando la carga de la rabia y la tristeza del cuerpo, que nos cierra a la sensibilidad y al contacto afectivo con el otro.

EL DARSE CUENTA DEL ASPECTO EMOCIONAL Y MENTAL

A veces la gente expresa sus emociones de forma desordenada, sin saber qué pensamientos las están activando. Por otro lado, crean historias y culebrones con la mente y se expresan emociones totalmente desvinculados de su cuerpo.

El no estar conectado con nuestra corporeidad, nos lleva a una sobredimensión de nuestros problemas cotidianos, creando diagnósticos mentales alimentados con dramas, desconectándonos a su vez de lo que nos pasa en el momento presente. Por ello es importante buscar formas de canalizar nuestras emociones de forma creativa y de observar nuestros pensamientos con valentía y presencia.

Hay propuestas muy sencillas y a la vez eficaces, como EFT (técnica de liberación emocional) que de forma muy fácil nos ayuda a liberar la carga emotiva, saliendo de la sobreactuación, para después poder ver el pensamiento que la produjo.

Otra herramienta para cuestionar los pensamientos recurrentes o ideas condicionadas es “El Trabajo” (The work) de Byron Katie.

Y con la  Co-escucha (una forma de meditar en la comunicación y escucha consciente), con estas herramientas  podemos liberamos de los pensamientos condicionados.

Así podemos aprender a crear un espacio mental  para poder ver con los ojos del presente y poder mirar de verdad.

TOMA DE CONSCIENCIA DE NUESTRO ASPECTO ESPIRITUAL

Es muy importante la meditación para abrirnos al discernimiento y a una mirada más amplia. Y cuando el cuerpo está trabajado y la emoción se ha canalizado de alguna manera, entrar en la meditación es más fácil.

Para mi es importante también unir la meditación a pensamientos elevados o correctivos, lo que tradicionalmente se llama oración, pues a veces si se medita sin este apoyo, y no se ha practicado anteriormente, puede dar lugar a ideas condicionadas acerca de la meditación.

Es importante observar, darse cuenta, de las trampas en que podemos caer a la hora de infiltrarnos en nuestro desarrollo personal y espiritual. Así podremos tener realmente una comunicación clara y en la misma dirección que el receptor.

Beatriz Blázquez
16 años de experiencia en el desarrollo personal y danza consciente.
 Próximos programas de vacaciones alternativas en La Hospedería del Silencio
www.vacacionesalternativasymas.com


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