Playa de La Concha, Isla de Lobos.
Bienvenido Welcome Herzlich willkommen
jueves, 17 de julio de 2014
miércoles, 16 de julio de 2014
Mariela Vidal, ex Guía de Pilates
LA IMPORTANCIA DE UNA BUENA POSTURA
Si desconocemos que una postura no es adecuada,
continuaremos adoptándola hasta que se convierta en un hábito.
Mantener una buena postura es esencial en nuestro día a día.
Una mala postura corporal puede afectar nuestra salud y funcionamiento así como
nuestra estatura, equilibrio y movilidad o simplemente la imagen que damos a
los demás.
Esta imagen contrasta una columna normal con una que
presenta Lordosis.
A lo largo de nuestras vidas adquirimos ciertas posturas con
preferencia a otras. Si desconocemos que una postura no es adecuada,
continuaremos adoptándola hasta que se convierta en un hábito.
Con el tiempo la forma de nuestro cuerpo va amoldándose a la
postura adaptada e intentará compensar el estrés que se provoca en esas partes,
exagerando la forma en otras zonas del mismo.
Cuando esto sucede, cualquier intento de adquirir una
postura correcta nos parecerá incómodo,
ya que nuestro cuerpo ha comenzado a adoptar una postura incorrecta.
La mayoría de la gente no presta mayor importancia a los
hábitos posturales, hasta que empiezan a tener dolores de espalda, u otros
problemas de salud. Esto se da generalmente en la etapa adulta donde nuestros
cuerpos ya han adoptado una mala postura, en particular los relacionados con la
columna vertebral, zona lumbar, dorsal y cervical.
Sin embargo, no todo está perdido. Reconocer una mala
postura es el primer paso para una posible corrección. Con la práctica del
método Pilates podrás disminuir la tensión en los músculos y en el resto del
cuerpo, te sentirás más ágil y te será más fácil desplazarte y mover tu cuerpo.
Sólo necesitas una práctica regular conciente para convertir una postura
adecuada en algo natural y cómodo.
Cifosis
Los diagramas comparan una columna sana y otra con cifosis.
A continuación algunos ejemplos de problemas posturales de
columna:
Lordosis lumbar: La parte inferior de la espalda se curva
pronunciadamente hacia dentro, lo que provoca deformaciones en la parte
superior de la espalda y el cuello.
Cifosis dorsal: La parte superior de la espalda se joroba,
ésta empuja el cuerpo hacia delante comprimiendo el pecho y el estómago.
Postura correcta, columna sana: Tiene curvas suaves, hacia
dentro en la parte inferior, hacia afuera en la parte superior y otra vez hacia
dentro en la zona cervical.
martes, 15 de julio de 2014
Aquí les dejo un video sobre Fuerteventura. Muy bueno.
https://www.youtube.com/watch?v=j_mBb8Fq6Lg&feature=share
Imagen de Cofete
https://www.youtube.com/watch?v=j_mBb8Fq6Lg&feature=share
Imagen de Cofete
lunes, 14 de julio de 2014
LOS PENSAMIENTOS EXISTEN EN OTRAS DIMENSIONES FÍSICAS
Los filósofos se han preguntado por siglos sobre la relación
entre mente y materia, hasta la física moderna está interviniendo en el debate.
He aquí un vistazo a algunas teorías acerca de dónde o de qué forma existen
físicamente nuestros pensamientos.
Noosfera, relacionado
al internet
Teikhard de Chardin, un sacerdote Jesuita y paleontólogo,
escribió sobre una “noosfera” conceptual durante la primera mitad del siglo 20.
Predijo que durante una etapa futura del desarrollo humano, se crearía una
membrana donde se recogerían los pensamientos y experiencias colectivas de
estos.
En “El fenómeno del hombre”, escribió:
“¿No es esto como un gran cuerpo que está naciendo con sus
extremidades, sistema nervioso, órganos perceptuales, con su memoria,
efectivamente es un cuerpo de algo viviente, que tuvo que venir para cumplir
con las ambiciones evocadas por un ser reflexivo que adquirió tal conciencia?”.
Muchos han hecho la conexión entre la noosfera de De Chardin
y el internet. ¿Puede el internet ser considerado una dimensión donde nuestra
conciencia colectiva existe?
Los pensamientos existen en otras dimensiones físicas
Bernard Carr, docente de matemáticas y astronomía en la
Universidad de Queen Mary en Londres, dice que nuestra conciencia interactúa
con otra dimensión. Albert Einstein afirmó que había mínimo cuatro dimensiones.
La cuarta dimensión es el tiempo, o espacio-tiempo; Einstein dijo que el
espacio y el tiempo no se podrían separar.
Carr argumenta que nuestros sensores físicos solamente nos
muestran un universo tridimensional. Lo que existe en dimensiones más altas son
entidades que no podemos tocar con nuestros sensores físicos. Él dice que tales
entidades deben de tener algún tipo de espacio donde existen.
“Las únicas entidades no-físicas que conocemos del universo
son las mentales, y… la existencia de fenómenos paranormales nos sugiere que
las entidades mentales deben de existir en otra forma de espacio”, escribió
Carr.
¿Nuestros
pensamientos transcienden en el tiempo?
Dean Radin, PhD, ha hecho estudios que muestran que nuestros
pensamientos tal vez tengan efecto sobre la realidad física, pero no en el
presente o futuro como lo esperaríamos. Es posible que nuestros pensamientos
del futuro afecten la realidad de nuestro pasado, dice.
Radin es jefe científico en el Instituto de Ciencias
Noéticas, una organización sin ánimo de lucro fundada por el astronauta de
Apollo 14, Edgar Mitchell, y dedicado a la investigación de la conciencia.
Radin también trabaja en el departamento de psicología en la Universidad de
Princeton y con otros grupos de instituciones en el Valle de Silicón.
Él ha puesto a prueba la habilidad de la intención humana
para afectar la realidad física, usando un generador de números aleatorios
(RNG). Él no ha sido el único científico que ha usado el RNG para ver la
interacción entre mente y materia, pero su enfoque es original, ya que muestra
cómo las intenciones a futuro afectan el pasado.
La mayoría de los exámenes de RNG se enfocan sobre avances
en el tiempo, el modelo estándar de causa-efecto. Una persona tiene la
intención y se espera que afecte el resultado final o que genere un número.
Radin abrió su experimento a la posibilidad de que
intenciones a futuro pueden afectar resultados pasados y encontró que “los
resultados observados podrían ser mejor modelados como un proceso que corre
hacia atrás en el tiempo desde una meta del futuro en vez de un proceso más
complejo que es el avance por el tiempo tratando de llegar al objetivo”, según
su estudio publicado en la Revista de Exploración Científica en 2006.
“Algunas formas de MMI (interacción de mente y materia)
aparentes pueden involucrar procesos que son más consistentes con el retro
causal de “jalones” del pasado que con los “empujes” del presente”.
Campos enormes entre
partículas
El profesor emérito, William A. Tiller de la Universidad de
Stanford propone que nuestros pensamientos tienen un efecto físico sobre “un
nuevo nivel de sustancia… que parece funcionar como una aspiradora física” (el
espacio vacío entre las partículas eléctricas fundamentales que componen
nuestros átomos eléctricos y moléculas normales).
Tiller dice que ha sido capaz de medir esta sustancia
invisible hasta ahora, pero sólo cuando interactúa con sustancias que nosotros
usualmente medimos. Esta interacción parece ocurrir cuando es estimulado por la
intención humana, sugiriendo que nuestros pensamientos existen físicamente en
esta dimensión.
Fuente: Infomistico
domingo, 13 de julio de 2014
QUIERO SER FELIZ
“Cuando sea mayor, quiero ser Feliz”. (Nicolás 6 años)
Felicidad, más de 33 millones de resultados en Google. Posiblemente el deseo más compartido por los individuos de diferentes tierras, etnias y tiempos.
Ya Aristóteles nos decía que “la búsqueda de la Felicidad es algo natural en el ser humano, y supone el fin máximo, el bien más preciado, la meta más alta, el fin de todos los fines.”
Pero, ¿en qué consiste la Felicidad? ¿Cómo se llega a ser Feliz? ¿La Felicidad es una meta o se encuentra en el hecho de recorrer el camino?
Si entendemos la Felicidad en términos absolutos, se tiene o no se tiene, continuamente nos plantearemos objetivos que permitan “dar el salto” a esa Felicidad. Nos orientamos hacia el futuro y no disfrutamos el presente, nos identificamos en la frase “seré feliz cuando…” Posponemos la Felicidad.
Sin embargo cuando entendemos la Felicidad como un continuo, como una escalera infinita que no tiene principio ni fin y en la que unas veces nos encontramos más altos y otras más bajos, somos conscientes de vivir el presente, no posponemos la Felicidad, asumimos que unas veces tenemos más Felicidad y otras menos y su búsqueda se prolonga durante toda la vida.
La Felicidad no es un resultado, es una actitud. Se trata de vivir conscientemente el presente, disfrutando, saboreando las cosas cotidianas y aceptando lo inevitable.
Se trata de llenar nuestra vida de emociones positivas que nos generen placer, de tener una vida significativa, sentir que seguimos un camino que nos lleva a un lugar deseado que coincide con nuestros valores y expectativas futuras, de llenar nuestra vida de actividades de flujo, aquellas con las que nos sentimos totalmente involucrados y nos producen gran gratificación, actividades relacionadas con la puesta en marcha de nuestras fortalezas, de alcanzar nuestros logros manejándonos en la excelencia y no en la exigencia y de tener relaciones positivas rodearnos de “personas corcho” capaces de tirar de nosotros y hacernos flotar, comportándonos nosotros mismos, como el corcho.
Se trata de aprender a gestionar las emociones negativas como la ira, la envidia, la insatisfacción continua que nos hacen tan infelices y ser conscientes de que tenemos el control sobre ellas.
Se trata de poner en marcha fortalezas como la gratitud, la perseverancia, la humildad, el esfuerzo, el optimismo, la paciencia…
Y tú, ¿qué quieres ser de mayor?
Itziar López
Telf. 626 413 432
“Cuando sea mayor, quiero ser Feliz”. (Nicolás 6 años)
Felicidad, más de 33 millones de resultados en Google. Posiblemente el deseo más compartido por los individuos de diferentes tierras, etnias y tiempos.
Ya Aristóteles nos decía que “la búsqueda de la Felicidad es algo natural en el ser humano, y supone el fin máximo, el bien más preciado, la meta más alta, el fin de todos los fines.”
Pero, ¿en qué consiste la Felicidad? ¿Cómo se llega a ser Feliz? ¿La Felicidad es una meta o se encuentra en el hecho de recorrer el camino?
Si entendemos la Felicidad en términos absolutos, se tiene o no se tiene, continuamente nos plantearemos objetivos que permitan “dar el salto” a esa Felicidad. Nos orientamos hacia el futuro y no disfrutamos el presente, nos identificamos en la frase “seré feliz cuando…” Posponemos la Felicidad.
Sin embargo cuando entendemos la Felicidad como un continuo, como una escalera infinita que no tiene principio ni fin y en la que unas veces nos encontramos más altos y otras más bajos, somos conscientes de vivir el presente, no posponemos la Felicidad, asumimos que unas veces tenemos más Felicidad y otras menos y su búsqueda se prolonga durante toda la vida.
La Felicidad no es un resultado, es una actitud. Se trata de vivir conscientemente el presente, disfrutando, saboreando las cosas cotidianas y aceptando lo inevitable.
Se trata de llenar nuestra vida de emociones positivas que nos generen placer, de tener una vida significativa, sentir que seguimos un camino que nos lleva a un lugar deseado que coincide con nuestros valores y expectativas futuras, de llenar nuestra vida de actividades de flujo, aquellas con las que nos sentimos totalmente involucrados y nos producen gran gratificación, actividades relacionadas con la puesta en marcha de nuestras fortalezas, de alcanzar nuestros logros manejándonos en la excelencia y no en la exigencia y de tener relaciones positivas rodearnos de “personas corcho” capaces de tirar de nosotros y hacernos flotar, comportándonos nosotros mismos, como el corcho.
Se trata de aprender a gestionar las emociones negativas como la ira, la envidia, la insatisfacción continua que nos hacen tan infelices y ser conscientes de que tenemos el control sobre ellas.
Se trata de poner en marcha fortalezas como la gratitud, la perseverancia, la humildad, el esfuerzo, el optimismo, la paciencia…
Y tú, ¿qué quieres ser de mayor?
Itziar López
Telf. 626 413 432
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