miércoles, 5 de marzo de 2014


ABRAZAR LA DUDA

Si te cuestionas tu forma de vida y tus creencias te parecen limitadas, es señal de cambio, de ruptura interior. Sientes incertidumbre, incluso tristeza, has perdido tu punto de apoyo y sientes un vacío. Sabes que tienes que soltar, pero no encuentras donde agarrarte.

No obstante, no te alarmes, esta ruptura interior es buena. La vida es energía en cambio constante, nada permanece fijo: nacemos y morimos varias veces en nuestro interior. Hemos de estar dispuestos a dejar morir y renacer lo que ya no sirve.

Valora lo que te ha servido hasta ahora y, cuando no lo necesites, déjalo ir. Crearás, así, un espacio para abrazar lo nuevo. Tómalo como una oportunidad para revisar tus sueños: ¿qué es lo que tu alma anhela alcanzar? Piensa que tu capacidad creativa es extraordinaria, confía en ti y cultiva tus recursos internos para alcanzar tus propósitos.

La creatividad, la flexibilidad y la confianza son la clave para vivir esa ruptura con lo viejo, el pasado, y aceptar lo nuevo.

Creatividad para visualizar y alcanzar tus metas, acercándote a tu ideal de forma novedosa. Flexibilidad para adaptarte a los cambios. Confianza en que todo irá bien, en que conocerás otras facetas de ti mismo, en tu potencial… Encontrarás nuevos apoyos, tendrás otras oportunidades y vislumbrarás nuevos horizontes que regenerarán tu entusiasmo y motivación.

Miriam Subirana
Profesora de meditación

 

martes, 4 de marzo de 2014

 
Anochece en la Playa del Viejo Rey, Fuerteventura

 
"Y justo cuando la Oruga pensó que era su final, se transformó en Mariposa"


LA SABIDURÍA COMO ACTITUD

La sabiduría tiene tres aspectos. En primer lugar es una manera de conocer, o habilidad cognitiva. En segundo, es una forma especial de actuar que es socialmente deseable, o una virtud. Y finalmente, es un bien personal, porque su práctica lleva al bienestar y al disfrute internos.

Los especialistas que carecen de sabiduría pueden actuar siguiendo su conocimiento, pero sus actos estarán presumiblemente sesgados a causa de su perspectiva limitada. Los actos de una persona sabia probablemente serán más armoniosos; en lugar de estar basados en una visión estrecha, están dirigidos a una comprensión más amplia del bien común. En ese sentido, la sabiduría es directamente proporcional al tamaño del grupo cuyo bienestar tiene en cuenta.

El tercer aspecto de la sabiduría es que, dicho brevemente, sienta bien. Los antiguos griegos no fueron los únicos en creer, como Sófocles, que “la sabiduría es la parte suprema de la felicidad”. Dos mil años después Montaigne escribiría: “La señal más manifiesta de la sabiduría es una alegría continua”. En toda cultura se ha considerado al sabio como alguien que está en la envidiable posición de ser serenamente feliz. Cuando alguien invierte su energía psíquica en las metas más universales y, en vez de afanarse en busca de su beneficio personal, apunta a una armonía más amplia, puede incluir objetivos más allá del marco limitado y mortal del cuerpo y es menos vulnerable a la desgracia.

El sabio disfruta de formar parte de las poderosas fuerzas que soplan a través del universo y que se manifiestan temporalmente en la realidad que conocemos, en el cuerpo que poseemos durante unos pocos años. Siendo consciente de que el Yo es una ilusión, aprende a no tomárselo demasiado en serio. Disfruta de estar vivo, pero percibe que la vida es más que la pequeña parte que nos es revelada y a la que la mayoría de seres se aferra con desesperación. La fluidez es la condición usual de su existencia; y no es extraño que el resto de la humanidad envidie su felicidad.

Mihaly Csikszentmihalyi, texto extraído de su libro “El Yo evolutivo”

lunes, 3 de marzo de 2014


AYUNO PARA RESISTIR LA QUIMIOTERAPIA

Realizar ayuno durante unos días antes del tratamiento puede reducir los efectos secundarios incómodos y peligrosos de la quimioterapia contra el cáncer, según Walter Longo, de la Universidad del Sur de California (Estados Unidos). Los experimentos realizados con ratones demostraron que las células sanas que carecían de nutrientes resistían mejor que las bien alimentadas y que las cancerosas a la acción de la quimioterapia.

En teoría, esto abre la puerta a nuevos enfoques terapéuticos que permitirán utilizar  dosis mayores de quimioterapia. Longo y sus colegas indicaron que los animales alimentados con dietas bajas en calorías viven en general más, en parte porque sus células pueden resistir mejor el estrés. También observaron que las células en ayunas pasan a una especie de  modo de hibernación, mientras que las células cancerosas forman tumores porque carecen de esa posición de “apagado” y crecen descontroladamente. Se recomienda a los pacientes que no tomen la decisión de ayunar por su cuenta y que consulten esta posibilidad con sus médicos.

Revista Cuerpo Mente
 

domingo, 2 de marzo de 2014


Bonita imagen de Fuerteventura, al norte de la isla. Tierra, cielo y mar en perfecta armonía.


AUTOCONOCIMIENTO

Un niño de la India fue enviado a estudiar a un colegio de otro país. Transcurrieron algunas semanas y un día el jovencito se enteró de que en el colegio había otro niño indio y se sintió feliz. Indagó sobre ese niño y supo que era del mismo pueblo que él y experimentó una gran alegría. Más adelante le llegaron noticias de que el niño tenía su misma edad lo cual le produjo una enorme satisfacción. Pasaron unas semanas más y comprobó finalmente que le niño era como él y tenía su mismo nombre. Entonces, a decir verdad, su felicidad fue inconmensurable.

El autoconocimiento se torna autorrealización. Conocerse es también ser y serse. A través de la auto observación y la auto vigilancia, uno va desenmascarándose y liberándose de falsos ropajes y vestimentas para encontrar el propio centro. No hay dicha mayor que conocer la propia naturaleza real, que es como desplazarse de la periferia al punto de origen, de la burda máscara de la personalidad a la resplandeciente esencia. El trayecto está sembrado de dificultades, porque hay que atravesar el terreno sombrío de caos y confusión que hay en nuestra psiquis y cuyos velos ocultan el resplandor del ser.

Ramiro Calle, de su libro “Los Mejores Cuentos Espirituales de Oriente"