sábado, 26 de abril de 2014

viernes, 25 de abril de 2014

Cómo mantenerte sano incluso si comes chatarra, fumas, no haces ejercicio y bebes

La doctora Lissa Rankin explica cuál es el factor más dañino para tu salud, y no tiene nada que ver con si eres vegetariano, yogui o bohemio.


Desde que los doctores empezaron a enseñarle a la gente la importancia de dejar de fumar, moderarse el consumo de alcohol, llevar una dieta nutritiva y basada en vegetales y a cuidar su peso, millones de personas experimentan una culpa tremenda por sus hábitos no saludables. Sin embargo, la culpa no sirve de mucho en estos casos y no ha llevado a mejoras significativas en el público en general. Aunque muchas personas, y quizás cada vez más, lleven un estilo de vida medianamente saludable, otras tantas escogen no hacerlo.
 
La doctora Lissa Rankin, en su libro Mind Over Medicine: Scientific Proof That You Can Heal Yourself llevó a cabo un experimento interesante en torno a esto. En él argumenta que, mientras sí es importante llevar una vida sana y hacer algunas modificaciones para tener mayor bienestar, existen factores críticos que contribuyen a la salud y a la longevidad y que nada tienen que ver con los hábitos alimenticios o con los vicios. Como ejemplo de ello, Rankin cuenta la historia de los inmigrantes italianos que se establecieron en Roseto, Pensilvania, y que no llevaban un estilo de vida que se consideraría ni remotamente “sano”.
 
“Comían albóndigas fritas en manteca, fumaban como chimeneas, bebían mucho todas las noches y abusaban de la pizza y la pasta. Sin embargo, sorprendentemente, tenían la mitad de índice de padecimientos del corazón que el promedio nacional. No era el agua que bebían, los hospitales a los que iban o su ADN”, apunta la doctora. Un médico, perplejo por la ausencia de problemas del corazón en este grupo, inició una investigación y descubrió que esta pequeña y cerrada comunidad vivía en hogares multigeneracionales y disfrutaba de cenas comunales y festividades frecuentes, y ello les proporcionaba consuelo de la soledad que tantas personas sienten.
De acuerdo a la investigación, los efectos de la soledad en el cuerpo pueden ser fatales. Esta comunidad italiana, el cariño y el soporte de los demás aliviaba el estrés que sienten los solitarios, el cual incrementa los niveles de cortisol y activa el sistema nervioso simpático, que a su vez incrementa el ritmo cardiaco, eleva la presión arterial, incapacita al sistema inmune e incrementa el riesgo de enfermedades del corazón.
 
Ya que la gente de Roseto nunca se sintió sola, rara vez moría de problemas del corazón; la mayoría murió de viejo incluso si fumaba, se alimentaba mal y bebía. Resulta que el alivio de la soledad es medicina preventiva, y los datos científicos sugieren que la soledad es un factor mucho más grave que fumar o no hacer ejercicio.
 
La doctora Rankin enfatiza que no es sólo la soledad la que contribuye al hecho de enfermarse o estar sano, es el estrés del trabajo, el estrés financiero y asuntos de salud mental como depresión y ansiedad. Una persona que se alimenta mal, fuma y nunca se ejercita, pero que disfruta de un matrimonio o un noviazgo increíble, muchos amigos, un trabajo satisfactorio, un sentido de vida, una actividad creativa, espiritualidad y una gran vida sexual podría tener mucho mejor salud que alguien vegetariano, yogui y solitario que se siente miserable en otros aspectos de la vida, de acuerdo a esta investigación.
 
Así, no es que este estudio sugiera que los malos hábitos y los vicios sean el secreto para una vida larga y placentera, sino que recomienda que empecemos a pensar acerca de nuestra salud más allá de los confines tradicionales y las “modas” con las que la mayoría de las personas definen “salud”.
 

Fuente: http://pijamasurf.com/2014/02/slidercomo-mantenerte-sano-incluso-si-comes-chatarra-fumas-no-haces-ejercicio-y-bebes/
 

jueves, 24 de abril de 2014

"Einstein: lo que más admiro de tu arte es la universalidad: no dices ni una palabra pero todo el mundo te entiende"

Chaplin: Cierto, pero tu gloria es aún mayor: el mundo entero te admira aunque nadie te entiende".

miércoles, 23 de abril de 2014


LOS DOS MONJES

Viajaban dos monjes a pie en dirección a su aldea, cuando de repente oyeron una voz que pedía socorro. Se dirigieron hacia el sitio del que surgía  la voz y vieron a una joven que se había caído a un río y corría el peligro de ahogarse. El monje de menor edad, diligentemente, se arrojó al agua, tomó a la mujer en sus brazos y la llevó a tierra firme. Se despidieron los monjes de la mujer y continuaron su camino, en silencio. Pasadas unas horas, el monje que no había ayudado a la mujer, increpó a su compañero:

-Deberías saber a estas alturas de tu vida monástica que nuestra doctrina no nos permite tocar a mujer alguna.

El monje más joven repuso:

-Yo cogí a esa mujer en los brazos y la dejé en tierra firme. Tú, sin embargo todavía la llevas encima.

Si la mente pudiera digerir y evacuar, permanecería más fresca, sana y receptiva y no crearía tanto conflicto, tensión y desdicha. Pero la mente acumula, acarrea y no es capaz de liberarse de impresiones y memorias inútiles y así no logra poner fin a la angustia que sus propios enredos provoca dentro y fuera de la misma. No es fácil aprender a vivir con una mente más libre de prejuicios, dispuesta a afrontar las circunstancias y eventos según se vayan produciendo, con la sabiduría del espejo, que refleja, pero no conserva.
 
 

martes, 22 de abril de 2014


Hay personas que tienen pareja pero se sienten tan solas y vacías como si no las tuvieran.

Hay otras que por no esperar deciden caminar al lado de alguien equivocado y en su egoísmo, no permite que ese alguien se aleje aun sabiendo que no le hace feliz.

Hay personas que sostienen matrimonios o noviazgos ya destruidos, por el simple hecho de pensar que estar solos es difícil e inaceptable.

Hay personas que deciden ocupar un segundo lugar tratando de llegar al primero, pero ese viaje es duro, incómodo y nos llena de dolor y abandono.

Pero hay otras personas que están solas y viven y brillan y se entregan a la vida de la mejor manera. Personas que no se apagan, al contrario, cada día se encienden más y más. Personas que aprenden a disfrutar de la soledad porque las ayuda a acercarse a sí mismas, a crecer y a fortalecer su interior.

Esas personas son las que un día sin saber el momento exacto ni el por qué se encuentran al lado del que las ama con verdadero amor y se enamoran de una forma maravillosa.

 TERESA DE CALCUTA