martes, 17 de marzo de 2015




ESTE POEMA FUE ESCRITO EN EL SIGLO XIX, POR VÍCTOR HUGO.

“Te deseo ".

Te deseo primero que ames,
y que amando, también seas amado.
Y que, de no ser así, seas breve en olvidar
y que después de olvidar, no guardes rencores.
Deseo, pues, que no sea así, pero que si es,
sepas ser sin desesperar.

Te deseo también que tengas amigos,
y que, incluso malos e inconsecuentes
sean valientes y fieles, y que por lo menos
haya uno en quien confiar sin dudar.

Y porque la vida es así,
te deseo también que tengas enemigos.
Ni muchos ni pocos, en la medida exacta,
para que, algunas veces, te cuestiones
tus propias certezas. Y que entre ellos,
haya por lo menos uno que sea justo,
para que no te sientas demasiado seguro.

Te deseo además que seas útil,
más no insustituible.
Y que en los momentos malos,
cuando no quede más nada,
esa utilidad sea suficiente
para mantenerte en pie.

Igualmente, te deseo que seas tolerante,
no con los que se equivocan poco,
porque eso es fácil, sino con los que
se equivocan mucho e irremediablemente,
y que haciendo buen uso de esa tolerancia,
sirvas de ejemplo a otros.

Te deseo que siendo joven no
madures demasiado de prisa,
y que ya maduro, no insistas en rejuvenecer,
y que siendo viejo no te dediques al desespero.
Porque cada edad tiene su placer
y su dolor y es necesario dejar
que fluyan entre nosotros.

Te deseo de paso que seas triste.
No todo el año, sino apenas un día.
Pero que en ese día descubras
que la risa diaria es buena, que la risa
habitual es sosa y la risa constante es malsana.

Te deseo que descubras,
con urgencia máxima, por encima
y a pesar de todo, que existen,
y que te rodean, seres oprimidos,
tratados con injusticia y personas infelices.

Te deseo que acaricies un perro,
alimentes a un pájaro y oigas a un jilguero
erguir triunfante su canto matinal,
porque de esta manera,
sentirás bien por nada.

Deseo también que plantes una semilla,
por más minúscula que sea, y la
acompañes en su crecimiento,
para que descubras de cuántas vidas
está hecho un árbol.

Te deseo, además, que tengas dinero,
porque es necesario ser práctico,
Y que por lo menos una vez
por año pongas algo de ese dinero
frente a ti y digas: "Esto es mío".
sólo para que quede claro
quién es el dueño de quién.

Te deseo también que ninguno
de tus afectos muera, pero que si
muere alguno, puedas llorar
sin lamentarte y sufrir sin sentirte culpable.

Te deseo por fin que, siendo hombre,
tengas una buena mujer, y que siendo
mujer, tengas un buen hombre,
mañana y al día siguiente, y que cuando
estén exhaustos y sonrientes,
hablen sobre amor para recomenzar.

Si todas estas cosas llegaran a pasar,
no tengo más nada que desearte.


lunes, 16 de marzo de 2015



DESCUBRE LA MÁGICA VIDA DE ESTA TRIBU QUE VIVE ENTRE RENOS


El reno provoca mucha simpatía entre niños y adultos debido a la relación que tiene con las diferentes tradiciones navideñas alrededor del mundo, por lo que se le considera un animal tierno. Además de que su forma, su pelaje y sus cornamentas son majestuosos e imponentes.

Están preparados para sobrevivir climas extremos, ya que tienen gran fuerza y resistencia y su cuerpo tiene las características para adaptarse a el. Es por eso que pueblos nómades los eligen como compañeros de viajes. Descubre la estrecha relación que tienen con la tribu Dukha de Mongolia.


Una tribu nómada vive en comunidad con cientos de renos en las montañas de Altai, en la zona exterior de Mongolia, Asia Central.


Las apacibles y tranquilas vidas de estos jinetes de renos, llevan fascinando desde hace generaciones a viajeros de todo el mundo.


En el año 518 aC, el poeta griego Píndaro, bautizó esta región como “Hiperbórea”, un lugar de ensueño donde sus gentes viven pacíficamente sin conocer “la enfermedad, el amargor de la vejez y con la mano lejos de la obra y la batalla”.


Hoy la tribu responde al nombre mongol de “Taïga Dukha” y esa región de ensueño es conocida como “la sierra de Taïga” en Khövsgöl, Mongolia.


La Taïga se encuentra delimitada por la frontera de Rusia y el remoto valle de Darkhad.


A pesar de su gran inaccesibilidad y lejanía, la zona está considerada como lugar protegido.


Aunque la tribu Dukha habita la zona, no son una fuerza dominante. Conviven en armonía con la naturaleza y comparten su espacio con una increíble variedad de animales.



Caballos salvajes, osos, águilas y lobos son comunes a los paisajes de Khövsgöl, pero ningún animal le gusta tanto a un Dukha como los renos.


Y es que los Dukha llevan generaciones criando y domesticando renos hasta convertirlos en una especie dócil y amigable. Su interés nunca ha sido el de pastorearlos como el ganado y comer su carne, sino el de ayudarse de su fuerza, por ello sus prácticas de cría de renos es plenamente consciente de la conservación de la zona y la biodiversidad.



Los renos son para ellos un gran medio de transporte en un medio hostil, que les permite desplazarse, cazar y viajar de ciudad en ciudad. Por todas esas razones, los Dukhas cuidan y respetan profundamente a sus compañeros.



Más allá de los renos, los Dukha tienen más tradiciones, una que implica a otro animal al que respetan y admiran, la caza con águilas.


Los Dukha práctican el Tengrianismo, una religión chamánica que cree en el totemismo, la conexión espiritual con los animales, las plantas y los seres espirituales.


Tal es su respeto, que uno de los títulos más honorables que pueden ser transmitidos de generación en generación dentro de la comunidad, es el cazador con águilas.


Este cazador, será el encargado de domesticar y entrenar a las águilas para cazar pequeñas presas que servirán de sustento a toda la comunidad.


(Fuente: messynessychic)

Las fotografías fueron tomadas por Hamid Sardar-Afkhami, quién disfrutó de algunos meses de convivencia con esta increíble tribu del Himalaya. La vida de ellos es increíble, lejos de la tecnología, lejos de la ciudad, del ruino y la contaminación. Solo conectados directamente con la naturaleza, parece algo sacado de una historia o leyenda.

http://www.tronya.co/tribu-entre-renos/#


LA PLAYA

Ir a la playa es una forma de sanarte y equilibrarte.

¿Por qué?

La arena de la playa está compuesta por pequeñas piedrecitas provenientes de la erosión de grandes rocas producida por el roce del viento y/o del agua.

Ello crea un gran manto de multitud de tipos de gemas, tumbándote sobre ella conseguirás un efecto muy parecido pero en menor capacidad a un tratamiento de Gemoterapia.

Una vez tumbados sobre nuestra toalla, de forma calmada y plácida, nuestro cuerpo físico se relaja y libera tensiones. En este estado de relajación podemos entrar en lo que consideramos estado de meditación, sea de forma consciente o inconscientemente.

Una forma de hacerlo conscientemente es centrándonos en nuestra respiración, realizándola desde el estómago, como hacen los bebés o niños de temprana edad.

El chacra 3 o plexo solar, situado unos dedos por encima del nuestro ombligo. Es el encargado de regular nuestra personalidad temporal/ ego. El tipo de vibración de este chacra lo asemejamos al color amarillo por su longitud de onda vibracional, como el sol. Por lo que parte de su nutrición se emparenta con este astro.

Tomar el sol es saludable en su justa medida y con las precauciones adecuadas.

Las personas que realizan esta práctica voluntariamente, les agrada y ello les produce placer por realizar una actividad de su agrado. El chacra 2 es el responsable de los placeres de la vida. En consecuencia este chacra también se beneficia de esta actividad. Desencadenando multitud de consecuencias beneficiosas para nuestro ser, sea el físico, espiritual e incluso el mental.

Nuestro cuerpo está formado prácticamente por minerales y agua, creando la parte material de muestro yo, el cuerpo físico, ello lo regula el chacra 1, el chacra raíz. En esta circunstancia él se conecta de forma más activa con el lugar de donde proviene nuestra materia, con la madre tierra.
El agua del mar contiene multitud de sales y minerales beneficiosos para nuestra salud física. Sin olvidad el sutil masaje que nos proporciona. Nuestro cuerpo está compuesto por el 70% de agua, igual que el planeta que habitamos. ¿Casualidad? ¡Causalidad!

Sin olvidar el momento de diversión, relax, y demás que vivimos en este lugar. Tan sumamente beneficioso para la parte mental de nuestro ser.

A groso modo e intentando explicarlo de forma lo más breve posible lo beneficioso de un tipo de interacción con la naturaleza, pues hay muchos más beneficios.

Recuerda que toda interacción con la naturaleza es beneficiosa.


¡Sé feliz! ¡SÉ!. 

http://www.revistauh.es/la-playa/


domingo, 15 de marzo de 2015



"Lo que más me sorprende..."





LA VIDA ES ESO QUE PASA MIENTRAS HACEMOS OTROS PLANES


Cuando me amé de verdad comprendí que, en cualquier circunstancia, yo estaba en el lugar correcto, en la hora correcta, y en el momento exacto, y entonces, pude relajarme.
Hoy sé que eso tiene un nombre… Autoestima

Cuando me amé de verdad, pude percibir que mi angustia, y mi sufrimiento emocional, no es sino una señal de que voy contra mis propias verdades.
Hoy sé que eso es… Autenticidad

Cuando me amé de verdad, dejé de desear que mi vida fuera diferente, y comencé a aceptar todo lo que acontece y que contribuye a mi crecimiento.
Hoy eso se llama… Madurez

Cuando me amé de verdad, comencé a percibir que es ofensivo tratar de forzar alguna situación, o persona, sólo para realizar aquello que deseo, aun sabiendo que no es el momento, o la persona no está preparada, inclusive yo mismo.
Hoy sé que el nombre de eso es… Respeto

Cuando me amé de verdad, comencé a librarme de todo lo que no fuese saludable: personas, situaciones y cualquier cosa que me empujara hacia abajo. De inicio mi razón llamó a esa actitud egoísmo.
Hoy se llama… Amor Propio

Cuando me amé de verdad, dejé de temer al tiempo libre y desistí de hacer grandes planes, abandoné los mega-proyectos de futuro. Hoy hago lo que encuentro correcto, lo que me gusta, cuando quiero, y a mi propio ritmo.
Hoy sé que eso es… Simplicidad y Sencillez

Cuando me amé de verdad, desistí de querer tener siempre la razón, y así erré menos veces.
Hoy descubrí que eso es… Humildad

Cuando me amé de verdad, desistí de quedarme reviviendo el pasado, y preocupándome por el futuro. Ahora, me mantengo en el presente, que es donde la vida acontece.
Hoy vivo un día a la vez. Y eso se llama… Plenitud

Cuando me amé de verdad, percibí que mi mente puede atormentarme y decepcionarme. Pero cuando la coloco al servicio de mi corazón, ella tiene un gran y valioso aliado.
Todo eso es… Saber Vivir

Charles Chaplin



Tus fuerzas son mayores que tus dudas y tu labor consiste en experimentar para estar al corriente de lo difícil que es sostenerse sin comprender la importancia de estos valores. No te engañes porque ya no te hace falta tener lo mejor y lo más último del mercado, hacer el viaje más caro, tener un éxito rotundo o conseguir el cuerpo ideal a golpe de bisturí.

John Lennon dijo una vez que “la vida es eso que pasa mientras estamos haciendo otros planes”, como si no hubiese límite de tiempo, cuando en realidad el tiempo es lo más finito que hay y siempre llegará a su fin.

Nos levantamos cada día como si tuviésemos la eternidad para comprender en qué consiste realizarnos y dar un paso más allá de nuestras metas. Se nos olvida que la fugacidad de la arena al pasar al otro lado del reloj es nuestra opción de pasarnos al otro bando y seguir escalando la montaña. También se nos olvida que de momento es la única vida que tenemos la certeza de poder compartir.

Puedes pararte a pensar en que quizás algo se te está escapando y puedes reflexionar sobre cuáles son los valores que todavía no has comprendido, si te importa tanto hacer lo que la sociedad entiende por lo más grande o lo que para ti tiene importancia. No es que sea incompatible, es que lo primordial es lo que tú sientas.

Vivimos en un mundo que no nos permite percatarnos de que, día tras día, el sol se acuesta muy temprano. Estamos tan ocupados soñando y programando el futuro, que dedicamos el tiempo presente a empaquetar esos sueños que pensamos cumplir algún día y los mandamos a un destino en el que quizás nunca estaremos.

Postergamos nuestra vida a un tiempo mejor en el que tengamos más horas en el día o hayamos conseguido cumplir nuestros objetivos. Y, con esto, nos olvidamos de que nuestro reloj no conoce el mundo más allá de las 24 horas que sabe marcar y que la opción de pelearnos con nuestros sueños es la que nos otorga el día de hoy.

Se nos ha olvidado que vivir es comprender que el tiempo pasa sin rodeos y que nos da la opción de apreciar las pequeñas cosas que nos ofrece amarnos de verdad. Precisamente vivir consiste en esto, en saber reconocer y apreciar los caminos que nos dan pistas para comprender que nuestra media naranja está dentro de nosotros y que no tiene mucho sentido buscar fuera lo más importante que nos brinda la vida.

Así es que, mientras te dispones a desorganizar tu mundo para que todo esto ocurra, no te olvides de tener muy presente que “la felicidad humana generalmente no se logra con grandes golpes de suerte, que pueden ocurrir pocas veces, sino con pequeñas cosas que ocurren todos los días“. Benjamin Franklin




sábado, 14 de marzo de 2015



EL MIEDO A NUESTRA PROPIA GRANDEZA O 'COMPLEJO DE JONÁS' UN TRASTORNO MUY HABITUAL

El complejo de Jonás es más habitual de lo que parece, así que no dejemos que nos trague la ballena. Abraham Maslow padre de la psicología humanista, acuñó el término “Complejo de Jonás” inspirándose en el personaje bíblico, para identificar una neurosis que habita en el ser humano: el miedo a la propia grandeza o huida del propio destino.

El Complejo de Jonás es, en suma, la negación de la capacidad de uno mismo para desarrollar su potencial, es el miedo y la ansiedad frenando nuestra visión de grandeza… sabes que vales para algo, lo visualizas, prevés el éxito y te asustas frenándote con la respuesta contraria, asegurándote que eres incapaz, haciéndote descender hacia el lado mediocre.

Jonás tenía un mensaje de Dios y una labor de intermediario en el pueblo de Nínive. Pero temió de su propia figura, se asustó y se escondió. Se sintió incapacitado de ese ejercicio, descreyó de sí mismo (“¿Quién?, ¿Yo?…”). Y Dios le envió una ballena que se lo tragaría por 3 días y 3 noches. Después de ese lapso, la ballena lo vomitó y Jonás aceptó el destino para el que había sido escogido y llevó su mensaje a Nínive.

La explicación de Maslow es que al igual que tememos lo peor de nosotros tememos, también, lo mejor, tememos a nuestras máximas posibilidades. Por lo general nos asusta llegar a ser aquello que vislumbramos en nuestros mejores momentos, en las condiciones más perfectas y de mayor coraje. Gozamos e incluso nos estremecemos ante las divinas posibilidades que descubrimos en nosotros en tales momentos cumbre, pero al mismo tiempo temblamos de debilidad, pavor y miedo ante esas mismas posibilidades.

Podríamos pensar, entre tantas cosas, que para desplegar “nuestra misión”, debemos romper nuestros moldes aprendidos. Como Jonás, que para desplegar su misión debía enfrentar el desafío de salir del refugio (pseudo-protección) de la ballena: la personalidad limitante.

Para ello debemos analizar y profundizar en que quizás nuestra personalidad actual fue elegida en pos de encajar en el mundo “adulto y moderno”: una Identidad no auténtica (con sus propios hábitos, valores, mecanismos de defensa, etc.). Una ballena que nos ha comido sin siquiera darnos cuenta.

Maslow dice al respecto, que frente a los grandes hombres o mujeres que se hallan en su máxima realización humana, surgen sentimientos de admiración; pero también emergen (y a veces no tan escondidos) sentimientos de hostilidad y envidia. Le proyectamos a esa persona “contra-valoraciones”. Y así, ¿quién tiene el coraje de mostrarse diferente, de mostrarse mejor que otros en algo novedoso y único?

Todos podríamos ser mejores de lo que somos si, en lugar de malgastar nuestra energía en envidiar las cualidades ajenas, aprendemos a amarlas, admirarlas para así también reconciliarnos con las propias ya que es un acto de generosidad entregar al mundo lo mejor de nosotros mismos.

  
Por Maxx Puente
Librepensador, Autodidacta y Soñador.



viernes, 13 de marzo de 2015




CUATRO GRANDES REFLEXIONES


1. No te preocupes por las personas de tu pasado, hay una razón por la que no están en tu presente y por la que no llegarán a tu futuro.

2. Una persona real no es perfecta, una persona perfecta no es real.

3. Una persona cambia por dos razones: aprendió demasiado o sufrió lo suficiente.


4. No dependas de nadie en este mundo, porque hasta tu sombra te abandona cuando estás en la oscuridad. No te preocupes por las personas de tu pasado, hay una razón por la que no están en tu presente y por la que no llegarán a tu futuro.