sábado, 1 de agosto de 2015

ALMAS GEMELAS QUE COINCIDIMOS EN EL TIEMPO, PERO CON BILLETES A OTROS DESTINOS


Tal y como diría aquella canción: “tantos siglos, tantos mundos, tanto espacio… y coincidir”. No hay duda, en ocasiones la casualidad teje maravillosas oportunidades que nos hacen conocer a esas almas gemelas, seres perfectos, que ponen luz y un sendero nuevo a nuestras vidas.

Son almas que coinciden en un mismo instante y que llegan a compartir con nosotros un breve fragmento de tiempo, meses o incluso años inolvidables, pero que sin embargo, al final todo se rompe y se viene a bajo como un castillo de naipes llevado por el viento.

Era, a tu parecer, la pareja perfecta, pero por diversas circunstancias nada de eso ha podido ser, cada uno de vosotros coincidisteis en un mismo andén de la vida, pero llevabais billetes para destinos diferentes.

En ocasiones, el amor no es suficiente para mantener una relación, a pesar de que esa alma sea el reflejo de la tuya. A veces hay distorsiones inconciliables o altos costes imposibles de mantener. Hay amores imposibles que nos hacen vivir fragmentos de tiempo perfectos, fugaces e intensos pero que llevan desde el inicio, fecha de caducidad.

La importancia de arriesgar y experimentar en la vida

Una vida sin riesgo y sin decisión, es una vida no vivida. Es posible que sepas desde el principio que determinadas experiencias pueden suponerte un alto coste, puede que seas consciente de que salir de esa zona de confort que es tu hogar y esa seguridad cotidiana, va a traerte la incertidumbre de “no saber”, y el riesgo de cometer no uno sino “varios errores”.

Arriesgarse es perder el equilibrio, pero en cada paso que damos aprendemos también a levantarnos de las caídas y a caminar otra vez con más seguridad. Lo mismo ocurre con nuestras relaciones afectivas, ahí donde nadie dispone del manual perfecto, ni viene a este mundo siendo un auténtico gurú de ese amor que es inmune al sufrimiento, de ahí que valga la pena tener en cuenta estas dimensiones.

¿Es verdad que existen las “almas gemelas”?

Es muy posible que al leer el título de este artículo hayas pensado que si en verdad existen las almas gemelas, éstas, jamás cogerán rumbos diferentes, porque las almas que son iguales están predestinadas a estar siempre juntas. No te equivoques, no hagas saltos al vacío sin paracaídas.

Los amores perfectos no existen, se trabajan día a día afrontando costes e invirtiendo tiempo y esfuerzos. Y aún más, en ocasiones el amor no es la única respuesta a todos los problemas, no es la respuesta a todas las dudas ni el puente a todos los vacíos emocionales. Hay grandes amores condenados a ofrecerse un gran sufrimiento ¿La razón? Hay muchas: falta de comprensión, egoísmos, inmadurez, diferentes intereses…

El destino teje en ocasiones maravillosos encuentros con personas que nos parecen “perfectas”, sin embargo, en ocasiones ese amor lleva fecha de caducidad casi desde el principio, es un alma gemela con la que compartir un tiempo determinado, disfrutando de cada minuto, de cada segundo… No obstante, recuerda siempre que tu alma gemela debes ser tú mismo/a, tú ese amor propio y cuidar cada día para seguir manteniendo el equilibrio a cada paso que das.

La importancia de arriesgarse en el amor

En ocasiones lo sabemos. Hay algo en nuestro interior que nos dice que esa relación no va a mantenerse en el tiempo, que te va a traer sufrimiento, que todo va a ser breve y puede que hasta doloroso. ¿Cometemos entonces un error al arriesgarnos?

En absoluto, no lo será siempre y cuando sepas muy bien dónde están los límites y recuerdes proteger tu autoestima. El amor es una aventura que merece ser vivida, y lo más probable es que si decides dejar escapar esa oportunidad, lamentes toda tu vida el no haberte arriesgado, el no haber bajado corriendo de ese andén y haber abrazado a esa persona hasta perder el aliento.

Lo que ocurra después nadie puede saberlo, tanto si es ese amor dura toda tu vida o si al final esa relación es tan breve como intensa y te ocasione más sufrimiento que felicidad, todo habrá valido la pena. Es tiempo vivido, es tiempo aprendido, tiempo en el cual has vibrado, reído y llorado.

Las penas que tengas después, las curará el día a día, pero sin lugar a dudas, puede que sea más doloroso lamentar el no habernos arriesgado, que el recordar un amor que no pudo ser. Eso, es el libro de la vida, y como tal, debemos escribirlo cada día.

No existe el amor sin riesgo, quien no se aventura no vive, quien no se esfuerza no ve la recompensa. Y a pesar de de que esa relación con nuestra “aparente” alma gemela no durará, ten por seguro que ese amor perdurará en tu recuerdo toda la vida.




viernes, 31 de julio de 2015

LO QUE HEMOS OLVIDADO DE LA VIDA

¿Te has puesto a pensar en todas las cosas bonitas que te rodean? ¿Cuándo fue la última vez que agradeciste por los pequeños placeres o momentos de felicidad? Es sorprendente con qué facilidad el ser humano se olvida de lo que realmente importa y pone su atención en cosas irrelevantes.


Quizás deberíamos tener el hábito de repetirnos una y otra vez que la vida es bella con todo lo que tiene y darnos cuenta de que al poner en la balanza, lo positivo pesa más que lo negativo.

Cuando las cosas no salgan como tú esperas, cuando te sientas abatido o que el mundo se derrumba a tus pies, recuerda las siguientes “verdades de la vida”:

-Estar ocupado no es sinónimo de ser productivo: Todas las personas que nos rodean van a mil por hora, pero eso no significa que estén haciendo algo para cumplir sus sueños o lograr sus objetivos.

Correr de un sitio a otro, estar pendientes del móvil todo el día o acudir a 10 reuniones el mismo día, no es garantía de éxito… ¡sino todo lo contrario! La productividad se relaciona con la concentración y la focalización.

-Tener miedo es causa de arrepentimiento: Ten mucho cuidado con los temores, les encanta matar a los sueños. Este enemigo silencioso pero muy presente, crece cada vez más si se lo permitimos.

El temor nos impide dar pasos hacia adelante y cumplir nuestras metas. Pero todo no termina allí (como si fuera poco), ya que después nos arrepentimos de lo que no hicimos.

-No se necesita una disculpa para poder perdonar: Si nos quedáramos esperando que todo el mundo se disculpara para perdonarlos… ¡estaríamos enojados con el universo completo!

El perdón no es un acto que únicamente atañe al perdonado, sino también al “perdonador”. No olvides que el odio, la ira y el resentimiento nos enferman y no nos permiten avanzar.

-Después de un fracaso siempre llega el éxito: Igual que ocurre con la tormenta y el arcoiris. ¿Si no te equivocas, cómo puedes triunfar?

Hasta que no aprendas a comprender los errores, no tendrás éxito. Piensa sino en los intentos que hicieron los científicos antes de encontrar la respuesta a sus hipótesis o las veces que tuviste que caerte de la bicicleta hasta que aprendiste a montarla.

-Vives según lo que has construido: Un refrán similar a este es “cosecharás lo que siembras” y es realmente así. No eres una víctima de las circunstancias, del destino o de lo que quieras echarle la culpa. Tus decisiones y actos te han llevado a donde te encuentras hoy.

Tienes dos opciones, seguir hacia adelante o quejarte por tus errores.

-La autoestima se alimenta desde el interior: Por más que digan: “qué lindo te queda el corte de cabello”, “qué buena presentación has hecho en la reunión” o te feliciten por la nota de un examen, nada tendrá sentido si no cuentas con amor propio.

Ten en cuenta las opiniones ajenas cuando sean positivas o te ayuden a mejorar, no cuando intenten destruirte. Y recuerda que si no te amas tú… entonces ¿quién lo hará?

-Somos el reflejo de quienes nos rodean: Si bien no siempre se puede elegir a quien tenemos al lado (la familia, los colegas de trabajo o universidad) sí tenemos la posibilidad de escoger con quienes relacionarlos y con quienes no. Intenta estar rodeado de gente que te haga mejor persona, no peor, que te ayude y te inspire, no que te denigre y te haga sentir disminuido.

-Los cambios son inevitables: Todos los días cambiamos, aunque no lo queramos. Tenemos 24 horas más de vida que ayer, por empezar. No solemos querer lo desconocido porque nos da incertidumbre. Nos aferramos a lo que conocemos porque nos inspira confianza. Pero esto no siempre es así. Hay veces en que los cambios son necesarios para crecer y desarrollarnos, para avanzar y lograr lo que deseamos.

-¡Vive el momento! No olvides que por alguna razón, al hoy le han puesto “presente”… ¡Porque es un regalo! Y es lo único que tienes por seguro, el ayer ya pasó y el mañana no sabes lo que te deparará. No importa cuánta añoranza ni ansiedad tengas, no puedes cambiar otro tiempo que no sea el presente.



jueves, 30 de julio de 2015

ATRAE EL AMOR A TU VIDA

“El verdadero amor es desinteresado y está exento de todo miedo. Se derrama sobre el objeto de su afecto sin que pida nada a cambio. Su alegría está en la alegría de dar.”
(Florence Scovel)

El amor es una de las ilusiones más grandes del ser humano. Este sentimiento nos desborda de una energía positiva que hace que todo fluya con más libertad.

¿Te has encontrado buscando desesperadamente a la pareja perfecta? ¿Tu aspiración más grande es sentirte complementado con la persona que haga girar tu mundo? Tal vez, ahora no creas que tendrás éxito pero no debes desesperarte.

Deja de vivir en la ilusión

“Mejor una cruel verdad
que una cómoda ilusión.”
(Edward Paul Abbey)

Hemos crecido rodeados de cuentos de hadas e historias con finales felices que incluyen al príncipe o la princesa perfecta. La realidad es mucho más compleja que eso por lo que es momento de dejar de soñar.

El amor va a llegar a tu vida, eso es cierto. Pero debes aprender a ver. Tú eres humano, tu pareja será humana y ninguno será perfecto. Lo que debes buscar es a alguien con quien seas compatible, dejar de esperar que alguien golpee tu puerta y salir a encontrarlo.

Es importante que seas realista en lo que buscas. No puedes esperar toda la vida por la persona perfecta porque simplemente no existe. Busca a quien sea compatible con lo que eres y lo que buscas para el futuro.

Mantente atento a lo que tienes cerca

Puede pasarte que tengas la certeza que en tu entorno no hay nadie que te interesa. Pues bien, entonces debes salir a encontrarlo. No me refiero a páginas de contactos, aunque pueden funcionar. Lo mejor es comenzar algún curso que te interese mucho, que te divierta y entretenga. Puede ser yoga, pintura, cocina o lo que sea.

Verás que las personas que concurran a ese curso tienen intereses similares a los tuyos.  Ya vas a tener cosas en común, solo falta que veas si son compatibles en lo demás. Lo que debes evitar siempre es “ir de cacería”. Enfócate en conocer al resto de los participantes, pasarlo bien y socializar.

Viste para aquello que buscas

“Aparentar es la llave más próxima a la falsedad
y por ende, a la soledad.”
(Anónimo)

¿Sientes que siempre te involucras con las personas equivocadas? Esto es más común de lo que imaginas y pasa cuando damos la imagen incorrecta. Asegúrate de vestir y actuar de la forma más natural. No busques impresionar a alguien o llamar la atención poniéndote ropa diferente a tu estilo.

Quien te mire debe mirarte y sorprenderse contigo tal cual eres. Además, es muy cierto que la primera impresión es muy importante, seguramente tú también analizarás al otro. Piensa que si la relación perdura, tarde o temprano te verá realmente como eres y si no le gusta esta nueva versión habrá problemas. Quien te quiera te va a querer por lo que tú eres.

Sé sincero

Deja claro desde el inicio tus opiniones. Debes decir “No” cuando sea necesario. La persona que te está conociendo y que quiera ser parte de tu vida, debe tener claro cuáles son tus gustos, que cosas te desagradan y qué te hace reír. No tienes que ser complaciente al inicio porque si no, el final va a ser un infierno.

La sinceridad debe ser tu arma más preciada. No comiences la relación con engaños, juegos o cosas que no sean ciertas. Es simple: si engañas a la otra persona, la relación será una mentira. Expresa siempre lo que sientes y confía en el otro para formar una pareja estable y segura. Si no hay preocupaciones innecesarias sólo tendrán tiempo para disfrutarse.

Enamorarse es un proceso

No te obsesiones con encontrar el amor. Esto es un proceso que lleva su tiempo y durante el camino conocerás, te equivocarás y seguramente saldrás lastimado. Sin embargo, la recompensa final vale la pena y todas las experiencias te prepararán para tu relación final. Por ahora, diviértete, conoce gente nueva y relaciónate con la que ya está en tu vida.

“El verdadero amor no es otra cosa que
el deseo inevitable de ayudar al otro
para que sea quien es.”

(Jorge Bucay)




Fuente: La mente es maravillosa.com

miércoles, 29 de julio de 2015

LA MAGIA DE SER MUJER DESPUÉS DE LOS 40

Se necesita mucho valor para amar a las mujeres marcadas por el pasado, aquellas de carácter fuerte pero de corazón bueno. Se necesita mucho amor para curar las heridas y las desilusiones.

Pero, sobre todo, se necesita ser inteligente, porque son tan maduras y tan experimentadas que ya no creen en lo que sienten, sino en lo que estés dispuesto a hacer por ellas.

Walter Riso

Ya no tenemos la figura de los 20 años, pues las piedras del camino han moldeado nuestro cuerpo. Nuestra mirada es cómplice, pues se ha formado durante años, permitiéndonos manejar el arte de amar a nuestros hijos, a nuestra pareja, a nuestros familiares y a nuestros amigos.

Acumulamos de manera perfecta la experiencia y la juventud, lo que nos hace dominar el arte y el manejo de nuestra esencia, sumando vida a los años que hemos disfrutado y que nos quedan por disfrutar.

Porque una mujer de más de 40 deja huella por dónde camina, haciéndose dueña de sus pasos. Siente que pisa fuerte, transmite seguridad en sí misma y ha logrado una estabilidad y un equilibrio emocional y personal que hipnotiza.


Más de 40 soplos de aire fresco…


¿Que cuántos años tengo?

Tengo la edad en que las cosas se miran con más calma, pero con el interés de seguir creciendo.

Tengo los años en que los sueños se empiezan a acariciar con los dedos y las ilusiones se convierten en esperanza.

Tengo los años en que el amor, a veces es una loca llamarada, ansiosa de consumirse en el fuego de una pasión deseada. Y otras un remanso de paz, como el atardecer en la playa.

¿Qué cuántos años tengo? No necesito con un número marcar, pues mis anhelos alcanzados, las lágrimas que por el camino derramé al ver mis ilusiones rotas…
Valen mucho más que eso.

¡Qué importa si cumplo veinte, cuarenta, o sesenta!
Lo que importa es la edad que siento.

Tengo los años que necesito para vivir libre y sin miedos.
Para seguir sin temor por el sendero, pues llevo conmigo la experiencia adquirida y la fuerza de mis anhelos.

¿Qué cuantos años tengo? ¡Eso a quién le importa!
Tengo los años necesarios para perder el miedo y hacer lo que quiero y siento.

José Saramago

Los 40 y los 50 son un momento peculiar, en el que te encuentras entre dos generaciones que ponen en evidencia lo efímero de la vida, por eso nos damos cuenta de que hay que aprovecharla y conciliar nuestros mundos. Dejas de preocuparte por lo que pasó y por el que pasará para comenzar a disfrutar de lo que está pasando.

A partir de los 40 por fin entendemos  que cada persona que te encuentras tiene un papel. Algunas personas te ponen a prueba, otra te utilizan, no falta quien te ama y te enseña, pero las personas realmente importantes son las que sacan lo mejor de ti. Son y serán personas pocos comunes y extraordinarias las que te recuerdan que todo ha merecido la pena.

La magia del momento

Las mujeres de mi generación son las mejores. Y punto. Hoy tienen cuarenta y pico, y son bellas, muy bellas, pero también serenas, comprensivas, sensatas y, sobre todo, endiabladamente seductoras, esto a pesar de sus incipientes patas de gallo o de esa afectuosa celulitis que capitanea sus muslos, pero que las hace tan humanas, tan reales…

Hermosamente reales.

Sharon Stone con 48 años.

Muchas mujeres de más de 40 ya se han visto en situaciones complicadas. Han podido ser renegadas y rechazadas por su sociedad. Han vivido traiciones y desengaños que las han hecho madurar. Han podido sentir en su piel el desgarro de separaciones deshonrosas, de abandonos y de menosprecios.

Están forjadas en el fragor de la batalla y heridas por las flechas más inesperadas. Han cargado sobre sus espaldas gran parte del peso de la vida y, por eso, las mujeres con más de 40 han desarrollado un séptimo sentido que les permite ir más allá, mantenerse serenas y reconciliarse con la vida.

A modo de chiste, se dice que una mujer de 20 años puede ser atractiva, la de 30 puede ser seductora pero solo después de los 40 se puede ser irresistible. Este es el resultado de una mezcla perfecta entre experiencia y juventud.

De alguna manera, la mujer de más de 40 ha dado un importante paso en la búsqueda del amor, ahora se ama a sí misma mucho más que lo que lo hacía un década atrás.

No te olvides, mujer…

Tienes los años que permiten mirar la vida con calma pero con el interés de seguir creciendo. Ahora es cuando el amor puede ser ardiente o un remanso de paz. Cuando puedes gritar sin miedo tus temores y hacer lo que deseas aún temiendo al fracaso. Hoy puedes amarte, aceptarte y abrazarte, porque los años te han convertido en una persona mucho más plena, mucho más TÚ.




martes, 28 de julio de 2015

Barranco de los Canarios. Jandía. Aún quedan playas solitarias para perderse.


NI CONTIGO NI SIN TI, CONMIGO

La libertad no existe sin desapego, ni el desapego es falta de Amor.


Celos, temores, reproches, enfados, complejos… ¿Hasta dónde puede llegar a contaminarse un amor? Hablamos de esos Amores con condiciones, esos por los que esperamos, por los que nos quedamos a un lado con la esperanza de que algún día nos den lo que necesitamos.

Pero en esta vida hay pocas cosas que nos pillan de sorpresa, somos capaces de vaticinar rápidamente que eso que anhelamos nunca nos llegará de la mano de un amor que nos está sometiendo a la espera.

Entonces llegan las sombras, las 7 plagas, los mil males, la tristeza, el cansancio y la desilusión. Y cuando lo hacen reina la más absoluta desolación, esa que nos impide seguir avanzando y hace que nos abandonemos.

No nacemos cautivos, nos cautivamos

La triste realidad es que abonamos el terreno emocional para cultivar amores insanos, de esos que obstruyen y destruyen. No apartamos las malas hierbas de nuestro camino y eso trae consecuencias.

No será posible deshacernos de la tristeza y el desconsuelo si no actuamos en la dirección contraria. Es mejor no taparse los ojos, cuando algo va mal simplemente se sabe, se intuye y se palpa en el ambiente.

Ni la libertad es falta de amor ni el apego es amor

En verdad, la manera de entender las relaciones y el amor es muy relativa. Querer ser un alma libre no significa renunciar al amor. Del mismo modo, hay relaciones que, aunque queramos mucho a la otra persona, son realmente tóxicas y dolorosas.

Hay muchas historias de amor que se pierden por orgullo, por olvido o, simplemente, por dejadez. Pero hoy hablamos de esas relaciones que han sido envenenadas por la viuda negra del amor: el sometimiento emocional.

Por eso, cuando el amor se convierte en un "ni contigo ni sin ti", es hora de abandonarlo o de reciclarlo. Es decir, en toda relación tiene que primar la salud emocional de uno mismo.

Puede que pienses que necesitas a esa persona, puede que te aporte muchas cosas pero hay momentos en los que hay que quitarse la venda y llegar a comprender que está incomodando a tus emociones.

Uno no se ama a sí mismo hasta que no le duele el amor

Esto es cierto, no logramos amarnos a nosotros mismos hasta que no nos hace falta. Esa necesidad interna de querernos y de comprendernos surge cuando alguien o algo nos falla, porque solo entonces vemos nuestras carencias.

La gente siempre piensa que lo más doloroso es perder a quien amas. Pero la verdad es que perderse sí mismo en el proceso de amar a alguien demasiado, olvidándote de quién eres, es mucho peor.

Cuando lo damos todo por un amor que no se lo merece, empezamos a querernos. Que nos toquen el orgullo hace saltar las chispas de nuestro amor interno. Nos cuestionamos en qué hemos fallado, nos planteamos cómo podremos sentirnos mejor y cómo saldremos adelante. O sea, que el amor propio entra por la cabeza, no por el corazón.

La tristeza y el sentimiento de vacío que se crea dejando ir lo que no nos hace bien es solo un reflejo del anhelo que nos ofrece lo que pudo ser y no fue, lo que queríamos que fuese y no llegó.

Si dejas entrar a esa tristeza sin miedo, te llevará a la liberación definitiva, a la independencia, a una vida sin resistencias, sin celos, sin reproches y sin culpas que contaminen.

Así, que si nos hemos subido al barco del amor contaminado, lo mejor es buscar algo que nos ayude a flotar en nuestro interior. Porque, ante todo, nuestra vida no se vive con o sin alguien, sino con nosotros mismos.

Fuente: http://lamenteesmaravillosa.com/ni-contigo-ni-sin-ti-conmigo/