miércoles, 28 de mayo de 2014


“NOSOTROS, COMO EL TIEMPO, TAMBIÉN NOS DESDOBLAMOS”

Jean-Pierre Garnier Malet, padre de la teoría del desdoblamiento del tiempo

Su teoría ¿está avalada por la ciencia? 

La respetada revista American Institute of Physics de Nueva York y su comité científico la han validado publicándola en el 2006 porque es una teoría que ha permitido, primero, prever, y luego, explicar la llegada de planetoides al sistema solar. ¿Quiere que le explique para qué sirve la ley del desdoblamiento del tiempo?

Sí, pero sencillito. 

Tenemos dos tiempos diferentes al mismo tiempo: un segundo en un tiempo consciente y miles de millones de segundos en otro tiempo imperceptible en el que podemos hacer cosas cuya experiencia pasamos luego al tiempo consciente.

¿Y todo eso sin enterarnos? 

Exacto. Tengo una síntesis instantánea de un análisis que he realizado en otro tiempo aunque no tenga la memoria de ello.

¿Así funciona el tiempo? 

Sí, en cada instante presente tengo un tiempo imperceptible en el cual fabrico un futuro potencial, lo memorizo y en mi tiempo real lo realizo.

¿? 

Tenemos la sensación de percibir un tiempo continuo. Sin embargo, tal como demuestran los diagnósticos por imágenes, en nuestro cerebro se imprimen solamente imágenes intermitentes. Entre dos instantes perceptibles siempre hay un instante imperceptible.

¿Como en el cine, que sólo vemos 24 imágenes por segundo? 

Sí, la número 25 no la vemos, es subliminal. En publicidad se ha utilizado ese tipo de imágenes para influir con éxito en nuestro comportamiento, lo que ha mostrado que lo subliminal es accesible a nuestra memoria. El desdoblamiento del tiempo ha sido probado científicamente y la teoría ha dado justificaciones a escala de partículas y a escala de sistema solar.

Tenía entendido que las leyes de la cuántica no se aplicaban a las cosas grandes. 

El fenómeno del desdoblamiento del tiempo nos da como resultado el hombre que vive en el tiempo real y en el cuántico, un tiempo imperceptible con varios estados potenciales: memoriza el mejor y se lo transmite al que vive en el tiempo real.

¿Nuestro otro yo cuántico crea nuestra realidad? 

Podríamos decir que entre el yo consciente y el yo cuántico se da un intercambio de información que nos permite anticipar el presente a través de la memoria del futuro. En física se llama hiperincursión y está perfectamente demostrada.

¿Estoy desdoblada como la partícula?


 
Sí. Y sabemos que, si tenemos dos partículas desdobladas, ambas tienen la misma información al mismo tiempo, porque los intercambios de energía de información utilizan velocidades superiores a la velocidad de la luz. ¿Conoce el principio de los gemelos de Langevin?

No. 

En los años 20, Paul Langevin demostró que si un gemelo viajaba a la velocidad de la luz, envejecía menos que el que se quedaba quieto. A Langevin no le creyeron. Hubo que esperar 50 años: en 1970, gracias a los relojes atómicos, se comprobó esa ley.

Entonces, en ese tiempo imperceptible pasó mucho tiempo. 

Exacto: si puedo viajar a velocidades prodigiosas, un microsegundo se convierte en un día entero. Cuando regreso, no sé si me he ido, puesto que he estado ausente un microsegundo.

Estupenda propiedad, ¿pero quién es el que viaja?, ¿yo? 

Existe otra propiedad conocida en física: la dualidad de la materia; es decir, una partícula es a la vez corpuscular (cuerpo) y ondulatoria (energía). Somos a la vez cuerpo y energía, capaces de ir a buscar informaciones a velocidades ondulatorias.

¿Y cómo asimilamos esa información? 


En el sueño paradoxal, cuando estamos más profundamente dormidos y tenemos nuestra máxima actividad cerebral, se da el intercambio entre el cuerpo energético y el corpuscular. Y es ese intercambio el que le permite arreglar el futuro que ha creado durante el día, lo que hace que al día siguiente su memoria esté transformada.

Vaya. 

El intercambio se realiza a través del agua del cuerpo. Ese intercambio de información permanente es el que crea el instinto de supervivencia y la intuición.

¿Fabricamos potenciales por medio de nuestro pensamiento? 

Así es. Si por ejemplo pienso en una catástrofe, ese potencial ya se inscribe en el futuro y puede sufrirla usted u otro. De manera que la conclusión es: "No pienses en hacer a los demás lo que no quisieras que los demás pensaran en hacerte a ti". No es una ley moral ni filosófica, es una ley física.

Es difícil controlar el pensamiento. 

De día, mucho; pero justo antes de quedarnos dormidos tenemos un minuto, y basta con que durante ese minuto controlemos: esa es la manera de conectar con esa parte energética, llamémosla el doble, para pedirle que solucione los problemas.

¿Es como una oración? 

No: es una relación, y hay que dejar totalmente las riendas al otro; las noches están para eso. La noche no sólo permite borrar potenciales no deseados, sino que también nos guía los pensamientos del día siguiente.
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lunes, 26 de mayo de 2014

viernes, 23 de mayo de 2014

María Massages
Fuerteventura - Las Playitas

GANAR VITALIDAD CON UN MASAJE

Durante la larga temporada invernal es habitual que nos encontremos sumidos en situaciones de decaimiento. El masaje energetizante aporta una inyección de vitalidad que nos ayuda a superar los momentos de bajo estado anímico, ya que reactiva la propia generación de energía.
Los protocolos de este tipo de masaje combinan técnicas de quiromasaje sobre los puntos energéticos que utiliza la tradición japonesa del Shiatsu. De esta forma, se activan y equilibran los centros de alta concentración energética -los chakras- y los canales por donde circula la energía. Como consecuencia, aumenta la concentración mental y el rendimiento físico, y se reduce el cansancio acumulado. Además, se obtiene una mejor disposición vital. El masaje energetizante también es apropiado para el mantenimiento muscular durante entrenamientos y rehabilitaciones.






miércoles, 21 de mayo de 2014


Dunas de Corralejo

SER POSITIVO ALARGA LA VIDA

La ciencia está demostrando la relación directa entre la felicidad y la salud: el bienestar psicológico puede suponer una diferencia de hasta dos años más de vida.
 
 
Hasta ahora sabíamos que la depresión y otras emociones negativas, como la ira y el estrés, roban años. Se ha estimado que, en conjunto, padecer depresiones graves reduce aproximadamente en dos años la esperanza de vida. Pero, ¿qué sucede con las emociones positivas?
 
La satisfacción vital, el placer de vivir o el disfrute cotidiano han sido casi invisibles para la ciencia, y apenas hemos tenido datos sólidos sobre el impacto en la salud física de las emociones positivas. Sin embargo, el panorama está cambiando. Por primera vez, la ciencia empieza a considerar que el bienestar mental es algo tan esencial que incluso está directamente relacionado con la esperanza de vida.
 
EL VALOR DE LA ALEGRÍA
 
Un reciente estudio de nuestro grupo de investigación, hemos comprobado que los países en los que hay un mayor nivel de bienestar psicológico o de felicidad se vive casi dos años más, de  media, que en los países  con un nivel de bienestar menor.
 
Los resultados de esta investigación coinciden con los de un estudio -punto de referencia en la Psicología Positiva-  realizado en una congregación de religiosas. Dicho estudio demostró que aquellas monjas que durante su juventud sentían y expresaban con más intensidad  y frecuencia emociones de dicha y felicidad morían casi ocho años más tarde que aquellas que habían tenido más dificultades para percibir en sí mismas, y manifestar, esas sensaciones de disfrute y alegría.
 
Ambos estudios, en definitiva, demuestran que las emociones positivas no sólo producen bienestar sino que dan años de vida. Hablar de felicidad es, por tanto, hablar de cosas serias.
 
Carmelo Vázquez. Doctor en Psicología de la Universidad Complutense de Madrid.